Beijing.- Leonardo Díaz desafió hoy otra vez la vida y la gravedad, quizás le viene de su homónimo renombrado italiano, para estampar su nombre en un espacio donde le faltaba, los Juegos Paralímpicos. Ya tenía el merito de recordista mundial, pero llegó decidido a olvidar la no inclusión en el podio de Atenas. Desde su silla de ruedas en el primer envío se superó a sí mismo. Estirpe de luchador por la vida lo llevó a poner un segundo de 40,87 metros, inalcanzable cota de oro. Fue promesa cumplida.
“Me sentí muy bien. Desde Cuba yo tenía esa confianza en mi mente y corazón para cumplir”, atinó a decir emocionado tras llegar a la zona mixta con su bandera, que paseó y ondeó después en lo más alto por segunda vez en menos de un mes en el Estadio Nacional, conocido como Nido de pájaros.
Allí mejoró en cinco de seis lanzamientos su anterior primado mundial de 39,90 metros lograda en los Juegos Parapanamericanos de Río de Janeiro 2007, pues al de inicio de 40,29 y al primado del orbe elevada después en 58 centímetros le siguieron otros con una gran estabilidad: tercero-40,74; cuarto-39,91; quinto 39,12; y sexto de 40,80.
“Con mis entrenadores Xiomara Rivero y Tomas Trébol desde San Nicolás de Bari (provincia La Habana) había conseguido mantenerme por encima de los 40 metros, por eso la seguridad de regresar con una medalla. El color lo puse yo”, dijo para lamentar no poder celebrar más con Xiomara, salida del escenario hacia La Habana por problemas personales urgentes.
“Era lo más anhelado en la vida. Este oro fue la respuesta a una gran consagración después de intento fallido en Atenas, cuando estuve por debajo de mis posibilidades”, expresó el atleta natural de Manzanillo, en la oriental provincia de Granma.
En su reparto Nuevo Manzanillo y en toda Cuba amanecerán hoy con la noticia del primer oro de la delegación cubana en los XIII Juegos Paralímpicos, alcanzado desde su silla de ruedas en la clasificación F55-56, como alborada de una actuación cubana aquí, que sumó ya además un bronce del judoca Víctor Sánchez en la primera jornada.
“Tengo esperanzas en mis compañeros del área de lanzamientos y también en los corredores y saltadores. Igualmente en el resto de los otros deportes. Muchas gracias al pueblo, la Revolución y Fidel por la confianza en sus atletas, porque de no existir no estaríamos aquí”, dijo respecto a lo por venir hasta la conclusión el día 17.
Leonardo, que mañana competirá en lanzamiento de jabalina y el 15 en bala, comenzó a practicar estas disciplinas desde 1997 cuando estaba viendo una competencia en su pueblo, donde el entrenador Carlos Licea le propuso participar dadas sus condiciones. Sin pensarlo mucho tomó los implementos y los lanzó con buenos resultados. A partir de ahí su vida cambió.
Una lesión en la médula debido a un accidente lo había condenado al estado parapléjico en una silla de ruedas. De esa circunstancia adversa también se levantó este campeón de 33 años, quien con 10 practicaba lucha.
OTROS DEL ATLETISMO AVANZAN
Las clasificaciones de varios corredores cubanos y la participación de Gerdan Fonseca en la final de bala categoría F44 (amputado miembro inferior) forman parte hoy de la presentación de los cubanos en el majestuoso estadio, lleno igualmente por inicio del evento.
Lázaro Raschid (T12-débil visual) se incluyó en la final de 800 metros del próximo miércoles 10 al entrar primero en el heat 2 con tiempo de 1:56.98 minutos, mientras que la velocista Daineris Mijan (T12) ganó la eliminatoria uno con 12.93 segundos en los 100 metros planos e iba a semifinales programadas para las 18:15 horas de este lunes.
Igualmente avanzaron por tiempo, Ethian Calderón (T46-amputado miembro superior) a la final de 200 metros y Julio Roque (T12) a semifinales de 100 metros. (JIT)