Washington- La búsqueda de un sumergible perdido en el Atlántico el pasado domingo se amplió hoy con la incorporación de un barco francés, que desplegó un vehículo operado por control remoto (ROV) para escanear el fondo marino.
El distrito noreste de la Guardia Costera de Estados Unidos tuiteó que la embarcación L’Atalante había llegado al área y acababa de desplegar su ROV, con el que esperan encontrar con vida a las cinco personas a bordo.
Sin embargo, a medida que el área de búsqueda se expande, aumenta el temor de que esté ya agotado el oxígeno en la nave, que salió en expedición hacia los restos del trasatlántico Titanic, aproximadamente a mil 450 kilómetros al este de Cape Cod, en Massachusetts.
Se cree que Titán transportó suficiente oxígeno para que la tripulación dure 96 horas, lo que significa que podría agotarse esta misma jornada.
Los rescatistas dirigen su atención a un área remota del Atlántico norte, donde se detectaron ruidos de golpes bajo el agua ayer.
“Estamos buscando dónde están los sonidos. Eso es todo lo que podemos hacer en este momento”, afirmó el capitán de la Guardia Costera de Esatados Unidos Jamie Fredrick.
“En cualquier caso de búsqueda y rescate, se analizan todos los factores diferentes. Cuánto tiempo hemos estado buscando, la capacidad de supervivencia, el oxígeno a bordo: es un conjunto complejo de datos que observamos”, declaró a CBS News.
Más embarcaciones y equipos de rescate se unieron al esfuerzo, pero encontrar al sumergible de 21 pies de largo en las condiciones casi heladas y oscuras del lecho marino, en un área con profundidades de hasta cuatro kilómetros, constituye un enorme desafío, alertan expertos.
OceanGate, la empresa que administra Titán, también enfrenta hoy numerosas objeciones por supuestos descuidos en materia de seguridad.
“Esta empresa decidió autocertificar su sumergible. No sigue ningún código y no sigue ninguna jurisdicción”, dijo a CBS News el ingeniero Bart Kemper, quien formó parte de la Sociedad de Tecnología Marina que expresó su preocupación sobre el tema en 2018.
Agregó el entendido que la compañía acordó ser más transparente con sus pasajeros después las preocupaciones planteadas, pero continuó operando el barco experimental sin la certificación típica para tales vehículos submarinos tripulados.
(Fuente: Prensa Latina)