Por segunda jornada consecutiva el Presidente cubano Miguel Díaz-Canel Bermúdez continúa de recorrido por los territorios del país. Esta vez, en jornada de viernes, llegó hasta el municipio espirituano de Taguasco donde visitó colectivos labores vinculados con la industria azucarera, sus derivados y colectivos de trabajo.
Muy temprano amaneció Díaz-Canel en área del Central “Melanio Hernández”, es la única fábrica de azúcar que muele en el territorio central, no sin contratiempos y desafíos que enfrentar, entre ellos, las lluvias inesperadas de finales del pasado año, la inestabilidad con la disponibilidad de combustibles y también roturas imprevistas que han detenido por momento el desempeño de la fábrica.
Sin embargo, a juicio del director de la Empresa Agroindustrial azucarera espirituana, Antonio Viamontes, ellos no renuncian a cumplir su plan actual de producción de azúcar, actualmente al 71 por ciento de cumplimiento. Todo depende de la estabilidad de la molida, también del comportamiento del clima y de la disposición técnica para llegar a la ansiada meta.
Una amplia explicación del directivo azucarero espirituano recibió el Presidente, sobre la base de una estructura que dispone además del central, una unidad de derivados y de soporte productivo y otras catorce unidades empresariales.
El entusiasmo y optimismo del director de la empresa azucarera contagia, porque la empresa ha pensado “grande”, tienen además 5 mil 700 hectáreas sembradas con cultivos varios que benefician a más de 6 mil personas de varias comunidades.
Aunque ahora mismo disponen de la caña necesaria para cumplir el plan de azúcar de la actual contienda, el talón de Aquiles está en el decrecimiento de las áreas cañeras sembradas durante la última década.
Al reflexionar sobre el tema, el Jefe de Estado consideró que no se puede comprometer el futuro y todo lo que se siembre debe hacerse con calidad, “el tema esencial aquí es sembrar y sembrar caña”, ratificó el Presidente.
Tras recorrer instalaciones de la fábrica de azúcar, el Primer Secretario del Partido explicó a una representación de trabajadores de Taguasco las dificultades por las que ha atravesado el central espirituano, lo que ha implicado un esfuerzo extra de sus trabajadores, no obstante afirmó “este central está a la vanguardia con un grupo de ideas, la aplicación de la economía circular, con el aprovechamiento del trabajo con los derivados y lo que se está haciendo para la próxima zafra. Pero aquí el problema es sembrar más caña”.
Seguidamente, el recorrido por Taguasco contempló la Unidad Empresarial Básica de Derivados que produce rones y alcoholes destinados entre otros, para la industria biofarmacéutica y la salud pública.
Previo al término de su recorrido, Miguel Díaz-Canel llegó hasta la UBPC Tiunucu donde compartió las experiencias de una familia campesina insertada en un colectivo laboral, que convirtieron áreas antes en mal estado en áreas de caña en condiciones de secano.
En amplio diálogo con dos representantes de las familias campesinas que laboran allí, el Presidente indagó sobre las ventajas de la inserción en estas formas productivas, el nivel de ingresos por resultados finales de trabajo y la repercusión en el modo de vida del núcleo familiar.
Trabajan en 57 hectáreas y lo hacen de sol a sol, con mucho sentido de pertenencia “a nosotros esto nos ha cambiado la vida”, afirmaron, “nosotros somos de origen campesino y el trabajo y sus complejidades no nos amilana, pero esto nos ha favorecido en el sentido que mejora ingresos, economía, todo”.
La caña que se siembra y no se atiende, no da resultado.
Aunque la actual contienda en el país no ha tenido los mejores resultados, estas experiencias demuestran que se puede avanzar en lograr mejores resultados más allá de los factores objetivos que impactan en la industria azucarera.
Como dijo el Presidente cubano, como industria hay que diversificarse, aplicando la economía circular, y todo ello tiene como elemento clave: disponer de mayor áreas de caña.
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