La Habana- A siete años de la desaparición física del líder histórico de la Revolución Cubana, Fidel Castro, su impronta sigue presente en nuestro movimiento deportivo.
Fidel concibió a la actividad física como un derecho del pueblo. Siempre estuvo muy vinculado al deporte, era habitual verlo en las instalaciones, recibiendo a los atletas cuando regresaban de algún evento internacional o incluso, visitándolos en algún centro hospitalario, tal y como ocurrió cuando el accidente de la tormenta del Caribe, Ana Fidelia Quirós.
El Béisbol era una de las pasiones de Fidel. Rodolfo Puente Zamora, uno de los grandes torpederos que ha jugado en nuestras Series Nacionales, recuerda el intercambio que tuvo con el “atleta mayor” cuando retornaron con el título del Campeonato Mundial celebrado en República Dominicana en el año 1969. “Esa fue la primera vez que lo tuve delante de mí y recuerdo que resultó muy impactante”.
Después el “javao” Puente tuvo varios encuentros con Fidel. “Cuando regresamos de un evento en Colombia, él me preguntó por una jugada que realicé con el antesalista Vicente Díaz, es que siempre estaba en todo los detalles”.
Rodolfo Puente jamás olvidará que en el año 1999, ya como entrenador de la selección nacional, el Comandante en Jefe estuvo muy vinculado a la preparación del equipo que después nos representó en los Juegos Panamericanos de Winnipeg. “Le mostramos a los jugadores que integraron el conjunto y nos preguntó por el eléctrico, nos quedamos mirándonos porque no sabíamos a quién se refería. Después nos dimos cuenta que era Isac Martínez, el jardinero derecho de Ciego de Ávila, al final se incluyó y fue el mejor bateador de Cuba en ese evento”.
Rodolfo Puente, quien ha sido uno de los grandes peloteros de nuestro país, dijo que la impronta de Fidel siempre estará presente dentro del movimiento deportivo cubano. “Ayudó mucho al deporte, los resultados que logramos a partir del triunfo de la Revolución, se deben en gran medida a Fidel”.
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