Continuando nuestro recorrido por los caminos de la radio en Cuba, el teatro (manifestación que tuvo su representación en este medio de comunicación) en los inicios del período republicano sirvió como vehículo para expresar a través de la risa y la sátira su inconformidad con el estado de cosas.
El género alhambresco conserva los tipos populares que hereda del bufo, los desarrolla y los entrega después a la radio, para continuar la línea tradicional del gallego y el negrito.
Todas las figuras famosas de Alhambra con el paso del tiempo serán después nombres estelares en la radio.
Hay una solución de continuidad, una línea histórica de desarrollo que va desde los bufos al teatro Alhambra, y culmina en el proceso de la radiodifusión.
Curiosamente este hecho no se ha planteado por ninguno de los críticos teatrales, según el investigador Oscar Luis López, ninguno e ellos se ha ocupado de la historia de la radio y su incidencia en la difusión de obras teatrales.