«Fidel no se equivocó» -les dijo el Primer Secretario del Comité Central del Partido, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, a más de 700 trabajadores sociales de todos los territorios del país- que durante la tarde de miércoles sostuvieron un encuentro con el también Presidente de la República, como continuidad al celebrado hace 8 meses.
Ustedes demuestran que la Revolución ha formado un ejército de profesionales y técnicos con profunda vocación humanista y desempeñan una función en la sociedad que nadie más puede cumplir- aseveró el Jefe de Estado ante la representación de trabajadores sociales de la capital, presentes en el Salón del Comité Central del Partido y a los de las demás provincias, enlazados por videoconferencia.
Durante casi 3 horas se compartieron impactantes historias de vidas, muchas de ellas narradas en primera persona y se evaluaron las acciones desarrolladas a partir del último intercambio celebrado el 14 de septiembre de 2022.
La ministra de Trabajo y Seguridad Social, Marta Elena Feitó Cabrera, recordó que en aquel intercambio se adoptaron 8 acuerdos, relacionados con ellos comentó que se realizó el Primer Seminario-Taller de experiencias del trabajo social, se ha ido diseñando una propuesta de perfeccionamiento de las estructuras hasta el nivel de circunscripción. Especial interés despertó en el debate el tema de la profesionalización del trabajador social, lo que ha permitido el inicio de una carrera universitaria, así como el perfeccionamiento del curso de técnico superior.
De acuerdo con Rafael Laguna Morales, trabajador social del municipio 10 de octubre y Presidente del Consejo Popular Acosta, hoy sus colegas están bien representados, tenemos trabajadores sociales en muchas instancias de dirección política, legislativa y de gobierno. “Hay Presidentes de consejos populares, de asambleas municipales, intendentes que son trabajadores sociales y hasta en el Consejo de Estado hay una trabajadora social”.
Conmovedoras historias de su trabajo cotidiano fueron relatadas. Las lágrimas no pudieron detenerse cuando se escucharon ejemplos de superación, de entrega, de acompañamiento. Conmoción causó la trabajadora social espirituana Mariela Álvarez que ha atendido a la población asistenciada no solo con recursos. De ahí que resumiera con magistral síntesis que “el trabajo social no es un centro de trabajo a donde se va a cobrar un salario, sino una profesión de entrega y amor sin límites”.
Del barrio “La timba”, llegaron las experiencias de Letsy Montano Valdés, participante en el primer encuentro, quien habló con sincera preocupación acerca de los desvinculados del estudio y el trabajo y el poco interés de aceptar en ofertas de empleos estatales, no hay transformación posible si la persona no siente el deseo, la necesidad de transformar su vida”, sentenció..
Yahima Carratalá García, trabajadora social de Guanabacoa, es una de las que optan por el grado de Doctora. En su intervención comentó sobre la necesidad de revisitar las concepciones fidelistas en torno al trabajo social y la vital participación de los trabajadores sociales en importantes espacios de decisión como la conformación de las estrategias de desarrollo local, la mayoría de ellas con un predominio de asuntos economicistas.
En distintos momentos del encuentro se reflexionó acerca de saber trabajar con el asistencialismo. Claudia Herrera, joven directora de Trabajo del municipio Habana Vieja disertó sobre la concepción que se tiene de la figura del trabajador social. “Hay que superar la concepción que en muchos lugares todavía existe, de que el trabajador social es el que da o quita la chequera. Nuestro trabajo va más allá de eso”, apuntó.
En línea con ese tema, el Jefe de Estado -que dijo estar agradecido por la sinceridad del diálogo- llamó al asistencialismo una vía para alcanzar un fin.
El objetivo no es el asistencialismo, el propósito es la transformación social, es cómo vamos incidiendo para que las personas vayan saliendo, y le vayamos propiciando salir de las causas que le provocaron una determinada condición social, para que no estén en desventaja. Por supuesto en ese tránsito el asistencialismo apoya también y lo tenemos que usar.
A los trabajadores sociales el dignatario dejó definidas las líneas de trabajo, llamó a incidir en la incorporación al estudio y el trabajo de personas desvinculadas, a prevenir y enfrentar la violencia contra la mujer, además exhortó a atender a las personas de la tercera edad y a la prevención del delito.
Al despedirse de estos médicos del alma, como les llamó Fidel, el Jefe de Estado confesó que encuentros como este le proporcionan mucha satisfacción y energía, además aumentan el compromiso ante lo que hay que seguir transformando.
Acompañaron al dignatario desde la presidencia el viceprimer ministro y titular de Economía y Planificación, Alejandro Gil Fernández, los miembros del secretariado del Comité Central del Partido, Jorge Luis Broche Lorenzo y Joel Queipo Ruiz.
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