El rechazo y condena en Cuba es unánime ante la reincorporación de la mayor de las Antillas a la lista espuria de supuestos países patrocinadores del Terrorismo, por decisión del actual presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
Para Teresa Menéndez Cervera, hija del líder azucarero Jesús Menéndez Larrondo, «la acción del gobierno de Estados Unidos está encaminada a provocar una guerra económica. Nosotros hemos estado, estamos y estaremos firmes junto a la Revolución. No nos van a poner de rodillas, esa es nuestra respuesta al gobierno de los Estados Unidos. Durante más de 60 años hemos sido y seremos consecuentes con la herencia mambisa y rebelde del pueblo cubano».
La arbitraria reinclusión de Cuba en la lista de países patrocinadores del Terrorismo la adoptó Donald Trump en el primer día del inicio del nuevo mandato presidencial.
«¿Cómo van a colocarnos en una lista de supuestos países patrocinadores del Terrorismo? El gobierno de Estados Unidos carece de moral, y aún más el presidente Trump, acusado de varios cargos criminales. Yo condeno enérgicamente la reinserción de nuestra Patria en esa lista espuria. Sepa, presidente Trump, que el miedo no come aquí», enfatizó Idalmys Carmona Anias.
Por su parte, Dora Roselló, trabajadora de la necrópolis de Colón manifestó que «la postura del gobierno de Estados Unidos con respeto a Cuba ha sido siempre de injerencia e intromisión. Nosotros hemos sido víctima del Terrorismo de Estado desde el vecino del Norte durante más de 60 años. Ante la nueva arbitrariedad del presidente Trump nos mantenemos firmes en la defensa de nuestros principios».
El presidente Donald Trump, revocó la orden del pasado 14 de enero con la que el ex mandatario Joe Biden retiró a Cuba de ese listado que elabora el Departamento de Estado de los Estados Unidos.
Isabel Lazo Torres, del Grupo de Capacitación de la CTC en la Habana indicó que «nosotros, los cubanos, ante esta nueva decisión del gobierno los Estados Unidos cerramos filas en torno a la Revolución. Es inmoral que nos digan terroristas, cuando trabajamos por la solidaridad y la paz en el mundo».
Recordemos que, durante su primer mandato (2017-2021) Donald Trump recrudeció el bloqueo económico, comercial y financiero contra la nación caribeña al aprobar 243 nuevas sanciones, y unos días antes de abandonar la Casa Blanca la incluyó a Cuba en la lista de países que patrocinan el Terrorismo.
La mayor de las Antillas figuró en la lista desde 1982 por, presuntamente, acoger en ese entonces a miembros de la organización independentista vasca ETA y de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), hasta que en 2015 el gobierno del presidente Barack Obama (2009-2017) la retiró durante el acercamiento diplomático entre Washington y la Habana.
El presidente saliente Joe Biden, seis días antes de abandonar la Casa Blanca anunció la retirada de Cuba de la lista.
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Asimismo, Biden suspendió las acciones en tribunales norteamericanos ante demandas judiciales amparadas por la Ley Helms – Burton para reclamar propiedades nacionalizadas en Cuba, tras el triunfo de la Revolución Cubana en 1959.
También ordenó eliminar la lista de entidades cubanas restringidas, la que designa a un grupo de instituciones con las cuales se prohíbe realizar transacciones financieras a ciudadanos y entidades norteamericanas.
No obstante, en su primer día en la Casa Blanca Donald Trump revocó todas esas medidas como parte de su política contra la Revolución en la isla caribeña.