Irán celebró un masivo funeral por el fallecido presidente Ebrahim Raisi con una gran asistencia de líderes internacionales.
Raisi falleció el domingo junto con el ministro de Exteriores Hosein Amir Abdolahian y otros seis pasajeros en un accidente de helicóptero en el noroeste del país.
El ayatola Ali Jamenei, encabezó la plegaria durante la ceremonia para despedir a Raisi y a todos los fallecidos. Con Raisi, «hemos perdido a una personalidad excepcional. Era un muy buen hermano. Un funcionario eficaz, competente, sincero y serio«, declaró Jamenei.
Después del rezo encabezado por Jamenei, empezó una procesión de los ocho ataúdes hasta la plaza Azadi, en una marcha en la que participaron cientos de miles de personas.
A la ceremonia asistió Mohammad Mokhber, designado como presidente interino hasta la celebración de elecciones el 28 de junio.
También estuvieron presentes los altos mandos del ejército y de los Guardianes de la Revolución, y el jefe del brazo político del movimiento islamista palestino Hamás, Ismail Haniyeh, y el número dos del Hezbolá libanés, Naim Qassem.
En total suman unas 50 delegaciones internacionales las que asisten a los funerales entre las que resalta la presencia de los primeros ministros de Irak, Armenia, Pakistán, Qatar, Azerbaiyán, Siria y Georgia, además de los cancilleres de Venezuela, Turquía, Egipto, Bielorrusia, Omán, Kuwait, Emiratos Árabes Unidos y Sri Lanka. Hubo también representantes de Nicaragua, China, Rusia, Argelia y Serbia.
Este jueves se realizará el entierro de Raisi en Mashhad, su ciudad natal.
El accidente se produjo el domingo en una zona montañosa en el noroeste de la nación persa cuando la comitiva iba camino a la ciudad de Tabriz tras inaugurar una presa en la frontera con Azerbaiyán.
La operación de rescate, complicada por la lluvia y la niebla, implicó a decenas de equipos y contó con la ayuda de Turquía, Rusia y la Unión Europea.
Tras el deceso de Raisi, Jamenei declaró cinco días de luto nacional y las exequias empezaron el martes con decenas de miles de asistentes al traslado de los féretros desde Tabriz a la ciudad santa chiita de Qom.
Desde Teherán, los restos de Raisi y su comitiva serán trasladados a la provincia de Jorasán del Sur y de allí a Mashhad.
Tal y como recuerda el diario La Jornada, los funerales masivos se enmarcan en una tradición muy arraigada desde la fundación de la República Islámica en Irán. En 2020 una inmensa multitud despidió al general Qassem Soleimani, un importante mando de los Guardianes de la Revolución muerto en un ataque estadounidense.