Con la presentación de la cartera de oportunidades del Ministerio de la Industria Alimentaria ante una representación de casi 100 mipymes privadas dio inicio este viernes en La Habana un encuentro de intercambio cuyo propósito busca, desde alianzas de trabajo, reactivar las capacidades de la industria nacional, disminuir los costos e incrementar los niveles de oferta de alimentos para el pueblo.
El titular del sector, Alberto López Díaz informó que durante el primer semestre del año el país importó más de 911 millones de dólares en alimentos, bebidas y refrescos, de ellos el 77% le corresponde al organismo, entre empresas estatales y privadas.
Se han identificado 14 renglones cuyos volúmenes de importación superan los 623 millones de dólares, la mayoría en producción terminada y lista para la venta, ” nosotros les vamos a proponer cómo podemos lograr alianzas, incrementar con ese mismo dinero las producciones físicas, generar mayores ingresos y un mejor funcionamiento de la empresa”.
Mencionó las fortalezas del sector y las oportunidades que este ofrece a los empresarios privados. Insistió que las negociaciones deberán ser ventajosas para ambas partes e hizo referencia a una propuesta presentada al Consejo de Ministros que exoneraría del pago de arancelas aquellas empresas privadas que se encadenen con la industria alimentaria.
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En un dialogo abierto los empresarios privados validaron de positivo la realización de este encuentro que, según el ministro podría replicarse en otras provincias del país. A la vez se refirieron a algunos elementos que frenan las iniciativas de cooperación en materia productiva, como el tema del reaprovisionamiento de las dividas.
Sobre este último elemento, la viceministra de Economía y Planificación, Johana Odriozola explicó la complejidad del tema y señaló que existen algunos espacios para ese reaprovisionamiento, aunque aún son insuficientes.
Insistió en que el país trabaja en la búsqueda de una solución a dicha problemática que no se resuelve con una norma jurídica. Este constituye sin duda, uno de los cuellos de botella que enfrenta la economía cubana, no solo la de los actores no estatales, sino también de la de la empresa estatal socialista.
Asimismo evacuó dudas sobre las nuevas legislaciones asociadas al comercio mayorista, en el que solo estarán autorizadas a ejercerlo aquellas empresas que lo contemplen en su en su objeto principal, lo cual no desestima que otras lo puedan hacer siempre y cuando modifiquen el mismo.
En las consideraciones finales, el Ministro de la Industria Alimentaria reconoció de certera la propuesta generada durante el encuentro de exonerar del pago de aranceles no solo a los importadores de materias primas e insumos, sino que las normas incluyan aquellos que importen tecnología.
Habló de como protegen los países su producción nacional, en especial con aranceles y cuotas de importación. Ejemplificó como la Lapaciega está en capacidad de producir pastas con destino al turismo y sin embargo este sector las importa. Como dato adicional señaló que las importaciones de la industria del ocio, en el primer semestre del año ascienden a unos 43 millones de dólares.
“nosotros le estamos proponiendo al país que mientras este ministerio tenga la capacidad productiva, hay que regular las importaciones de determinados productos terminados y estimular la importación de materias primas”, acotó.
A aquellos empresarios estatales que aún no concientizan que las mipymes forman parte del entramado económico del país habrá que hacerle frente, puntualizó.
Al encuentro asistió además la Presidenta del Instituto de Actores Económicos No Estatales, Lazara Mercedes López Acea quien ponderó la importancia del encuentro y la necesidad de hacerlo extensivo hacia otros sectores de la economía.