El día que llevé por primera vez a mi hija Teresita al círculo infantil a sus ocho meses de vida lloré; sin embargo, pasados unos pocos meses todo cambió y me despedía sonriente en la puerta de la institución diciéndome adiós de la mano de su seño.
Sesenta y cuatro años de creados cumplen este 10 de abril los círculos infantiles. Varias generaciones de cubanos crecieron en sus salones donde las educadoras o seños como se les conocen desde aquellos momentos, los prepararon para una vida plena y feliz.
Instituciones devenidas lugares ideales para que los niños desarrollen hábitos y habilidades, realicen juegos de roles que les enseñan sobre las más diversas profesiones y oficios e incentivan la imaginación, a la vez que socializan con otros pequeños.
Según recuerdan testigos presenciales: Inolvidable resultó el acto de fusión de las organizaciones femeninas revolucionarias, en el salón-teatro de la Central de Trabajadores de Cuba (CTC), el 23 de agosto de 1960 ; allí el Comandante en Jefe, Fidel Castro Ruz indicó que era preciso estudiar todos los problemas de las mujeres para que trabajaran y dejaran a sus hijos en lugares seguros con personas confiables.

El líder histórico de la Revolución Cubana, máximo impulsor de la creación de esas instituciones dio la tarea a Vilma Espín, Presidenta de la Federación de Mujeres Cubanas. El objetivo fue cumplido cabalmente: crear lugares donde los pequeños sintieran el calor y el amor de quienes los cuidaban, los protegían y formaban en los más puros sentimientos y valores.
El “Camilo Cienfuegos”, el “Ciro Frías” y el “Fulgencio Oroz”, fueron los tres primeros centros de este tipo inaugurados en La Habana el 10 de abril de 1961, aledaños a barrios pobres, creados justamente una semana antes de la invasión mercenaria a Playa Girón.
Según los psicólogos es sorprendente el conocimiento que los niños adquieren a través de diferentes áreas del desarrollo como son: La Lengua Materna, Nociones Elementales de las Matemáticas, Educación Física, Música, Artes Plásticas, Socio-Moral, Conocimiento del Mundo de los Objetos y Análisis Fónicos.




Los especialistas consideran, además, que los centros de este tipo proporcionan el desarrollo físico y mental armónico de los niños/as, previenen enfermedades, trasladan a la vida familiar las costumbres y hábitos higiénicos educativos de la institución y ayudan a los padres a conocer y orientar mejor a sus hijos.
No obstante el paso de los años perduran en quienes asistieron a esas instituciones Infantiles los olores y sabores peculiares del lugar, también la hora del sueño en los catres; las diminutas sillas y mesas; la comida sin ayuda de los adultos, y otras cuestiones fundamentales que les daban independencia.
Durante más de seis décadas los círculos infantiles en Cuba favorecieron la integración plena de la mujer a la sociedad y desempeñaron un importante papel en la formación de los infantes desde las edades conocidas como primera infancia.
