Por lo general se pasa con indiferencia por delante de un árbol de naranja agria. Al parecer se trata de uno más de los que nacen espontáneamente en jardines y patios, sin atributos sobresalientes, sin embargo la planta atesora propiedades para la salud que a muchos asombrarían.
El fruto, a pesar de que tiene una apariencia desagradable y rugosa, contiene diversidad de propiedades medicinales: acelera el metabolismo, reduce la grasa corporal, alivia enfermedades respiratorias, insomnio, colitis, estreñimiento, insuficiencia renal y hepática, fortalece los vasos sanguíneos y entre otras cosas. Además, disminuye la presión arterial y reduce el colesterol.
Según un sitio consultado, también se le llama naranja amarga, pero no es así porque sea un fruto poco maduro: proviene de un árbol diferente (citrus aurantium) y contiene neohesperidina que es lo que le da ese toque amargo que no gusta a todo el mundo.
La naranja agria comparte propiedades con cualquiera de sus otras variedades, como su fibra saciante muy apreciada en dietas porque también es diurética y un excelente quema grasas, y su capacidad para curar dolencias estomacales como pueden ser náuseas, vómitos o diarreas.
Tiene bajo nivel de azúcar y una fuente de fenilefrina. Esto es un descongestivo que la convierte en buena aliada en procesos catarrales por ejemplo como infusión o en vapores, además por sus vitaminas, en especial la C que también es antioxidante.
Como cualquier otra naranja, la agria se utiliza para preparar aceites, esencias y lociones en cosmética y perfumes. También se aprovechan sus flores de azahar.
Nutricionistas consideran que se distingue en la alimentación porque, al no ser dulce, se la combina con ingredientes que aprovechan mejor sus propiedades. Uno de los favoritos de los más golosos es el chocolate con naranja agria. Ha de ser sin leche y con alto porcentaje de cacao para poder disfrutar del contraste simplemente utilizando la corteza confitada y bañada en chocolate o en bizcochos y tartas que incluyan estos dos elementos en su receta.
Se puede añadir un poquito de licor de naranja agria; también se suele utilizar para acompañar recetas de pudin o flanes.
Aunque el uso más habitual de la naranja agria es la mermelada. Su alto contenido en pectina hace que sea ideal para esta elaboración porque le proporciona la textura perfecta. Sobre una tostada caliente, se consigue una mezcla deliciosa aunque también se puede incluir en recetas de pavo o pollo.
Es habitual que se use mezclada con azúcar o miel para encontrar un punto más agradable que guste a la mayoría de la gente. Se convierte en deleite para el paladar adobar las carnes con naranja agria.