En emisiones anteriores supimos cómo la Constitución de 1940 promulgó postulados constitucionales de avanzados enfoques sociales para su época.
Pero esos postulados requerían de una legislación complementaria para normar su aplicación o determinar los límites de su contenido y funcionamiento, de ahí que fuera una demanda popular a partir de entonces la aprobación de esas leyes complementarias.
Por ejemplo, lo referido al latifundio decía “la Ley señalará el máximo de extensión de la propiedad”, de modo que se logró una Constitución avanzada cuyo cumplimiento se convirtió en una meta a alcanzar.
Pero es bueno aclarar que a la vez que la Constitución de 1940 quedaba aprobada, continuó fue la evolución de las organizaciones obreras en nuestro país a lo largo del siglo XX.
Lo cierto es que, desde la ocupación militar norteamericana, se hicieron esfuerzos por crear una organización obrera nacional. Fue así que se fundó la Liga General de los Trabajadores Cubanos en 1899.
Esta Liga trató de representar a todos los trabajadores de Cuba y los que aún permanecían en la emigración, al vincular los objetivos de independencia y justicia social.
Las contradicciones de la sociedad cubana y la debilidad del movimiento obrero en aquellos años, hicieron que, a inicios de la República, desapareciera la Liga, después de la llamada huelga de los aprendices, desatada en noviembre de 1902.
Recuerda que andamos por los caminos de Cuba…