Volviendo sobre algunos de los aspectos que convirtieron a la Constitución de 1940 en un documento avanzado para su época, esta Carta Magna mantenía la gratuidad de la enseñanza primaria a cargo del Estado y el cobro de matrícula para la enseñanza preuniversitaria y universitaria.
La Constitución del 40 reconocía el ejercicio privado de la enseñanza, así como el derecho a la creación de universidades privadas. En el caso de la enseñanza oficial se establecía su carácter laico.
La Constitución del 40 también establecía la creación del Tribunal de Cuentas y del Tribunal de Garantías Constitucionales y Sociales, lo que era una vieja demanda en la lucha por crear organismos de control contra la corrupción político administrativa.
Entre los aspectos sociales que contempló la Constitución del 40 estuvo la prohibición de los despidos de trabajadores sin previo expediente sobre las causas del despido y establecía el salario mínimo, la jornada laboral máxima de ocho horas, y el descanso retribuido.
También reconocía la función social de la propiedad privada, que se respetaba y protegía, y proscribía el latifundio.
Recuerda que andamos por los caminos de Cuba…