El nombre es simple, Cuba Vibra, el espectáculo supremo, música, danza y alegría, en una de las zonas más emblemáticas de Madrid, la Gran Vía.
Lizt Alfonso Dance Cuba (LADC), en la continuación de una exitosa temporada en España, donde el Teatro EDP Gran Vía, un antiguo cine de 1944, se transforma con la presentación de la compañía, como un valor agregado al auge del turismo internacional en el país ibérico.
Después de casi dos horas de mambo, chachachá, son, bolero, rumba, conga, latin jazz, flamenco, swing o rock and roll, entre la intensidad de los bailarines, la colorida coreografía y la música, el público agradece con entusiastas ovaciones.
Las impresiones son estimulantes para la compañía, como confesó a Prensa Latina la laureada directora, coreógrafa y pedagoga cubana, Litz Alfonso, en entrevista exclusiva.
“En general, tanto en Barcelona como en Madrid, la gira ha sido muy linda, muy emotiva, porque el espectáculo conecta con los espectadores. Cuando termina, se percibe la emoción de la gente y esto nos complace a todo el elenco”, comentó.
Seguimos más adelante a Teulada (Valencia), Zamora y Palencia (ambos en Castilla y León), y terminamos en Zaragoza (Aragón), que es donde terminamos el periplo el 7 de julio, precisó Alfonso.
Después nos vamos a La Habana a realizar nuestro curso de verano y prepararnos para unas actuaciones que tendremos en Martinica, y otas presentaciones como por ejemplo Los Angeles (EEUU), entre otras, y con diferentes repertorios.
Como fundadora y actual titular de LADC, recibió en la Casa Blanca, de manos de la Primera Dama de Estados Unidos de América, Michelle Obama, el International Spotlight Award en 2016; fue Embajadora de Buena Voluntad de la UNICEF (2011).
Entre sus lauros, se cuentan también el Premio Dora de las artes escénicas canadienses en la Categoría de Mejor Coreografía Vida, así como el máximo galardón de Coreografía de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba por Sinceramente FGL, dedicado al centenario del natalicio de Federico García Lorca (1998); Alas (2006) y Vida (2009). Preguntada por Prensa Latina acerca de la variedad del repertorio de la compañía, Litz Alfonso ponderó que en el futuro cercano, junto con Cuba Vibra, estarán Habana Fénix, otro Cuba Vibra con más influencia española.
“Nuestra línea temática se ha mantenido, empezamos siendo una compañía de ritmos españoles en 1991 pero inmediatamente en 1993 cambiamos, declarando la danza y música fusión como sello de identidad hasta el día de hoy”, explicó.
“Por eso es que conectamos con el público del mundo entero, que se siente según el caso identificado con lo que está viendo en el escenario, esa mezcla que va desde el ballet clásico, danza contemporánea o moderna; los bailes populares cubanos que son tan ricos; los afrocubanos”, añadió.
Apasionada de su profesión, subrayó que se nutre de todo tipo de influencia musical y danzaría, “que hemos tenido desde el exterior, como el jazz, el blues, el swing, rock and roll; y la música y danza cubana que son tan fuertes, es decir esa mezcla que es una explosión en unidad de riqueza a través de toda la historia”.
Después de casi dos horas de mambo, chachachá, son, bolero, rumba, conga, latin jazz, flamenco, swing o rock and roll, entre la intensidad de los bailarines, la colorida coreografía y la música, el público agradece con entusiastas ovaciones.
Las impresiones son estimulantes para la compañía, como confesó a Prensa Latina la laureada directora, coreógrafa y pedagoga cubana, Litz Alfonso, en entrevista exclusiva.
(Por Fausto Triana/Prensa Latina)