Cuando solo faltan jornadas para el comienzo de las asambleas de rendición de cuentas del delegado a los electores, a partir del 20 de septiembre, La Habana se alista para retomar los intercambios con el pueblo.
Más de 10 mil asambleas de rendición de cuentas del delegado a sus electores tendrán lugar en los 15 municipios capitalinos hasta el venidero 15 de noviembre, como parte del primer proceso del actual 18 Período de Mandato de las Asambleas Municipales del Poder Popular.
Previos a los diálogos, en La Habana se procede a su aseguramiento para garantizar que antes, durante y después se cumplan con las normativas establecidas.
Por estos días en cada municipio se organizan intercambios para evaluar las perspectivas y protecciones con énfasis en la exigencia a las administraciones de acompañar a los representantes del pueblo como parte del perfeccionamiento del Poder Popular.
Habrá que atender con mucho énfasis los planteamientos de la población referidos a las Empresas Aguas de la Habana, Servicios Comunales, Viales, Viviendas y Eléctricas, que acumulan mayores niveles de requerimiento Popular.
En este primer intercambio de los 1335 delegados, 794 lo harán por primera vez. Este proceso de rendición de cuentas de los delegados del Poder Popular a sus electores, la capital lo dedica al aniversario 50 de creado el sistema, al 505 de la fundación de la Villa de San Cristóbal, y al 64 de creado los Comités de Defensa de la Revolución.
La capital está llamada a crear un ambiente de armonía en los 106 Consejos Populares con que cuenta, que garantice realizar con éxito el programa de reuniones, fortalecer el apoyo de los organismos administrativos y sociales a la comunidad integralmente, y aprovechar el momento para estimular a los vecinos y familias con mayores aportes al desarrollo social de cada demarcación. Aprovechar espacios propicios para desarrollar los procesos políticos tradicionales que consolidan la unidad del barrio.
Sin dudas, los delegados capitalinos tendrán por delante un nuevo reto en momentos en que el país afronta un retador panorama socioeconómico, en medio de las restricción financieras por la que atraviesa la Isla, y los efectos del bloqueo que por más de 60 años mantiene el gobierno de los Estados Unidos contra Cuba .
No obstante, el proceso será oportuno para la búsqueda de solución con la participación popular, y fortalecer el papel del delegado y la gestión del gobierno.