Jóvenes cubanos y venezolanos se alistan para realizar la ya tradicional Ruta Martiana en la Patria Bolivariana, y honrar la historia.
Se trata de la reedición y viaje a las raíces del recorrido que hiciera el Apóstol en 1881 desde su llegada a Venezuela, un país al que amó entrañablemente.
El periplo comienza desde la Guaira, donde arribó Martí en enero de ese año, y comprende 23 kilómetros de caminos de difícil acceso y ascenso de cumbres hasta llegar a la Plaza Bolívar, en Caracas, donde, sin quitarse el polvo del camino, se detuvo ante la Estatua del Libertador para homenajearlo como un hijo agradecido.
Miguel Guerra Guerra, activista nacional de la Juventud explicó otros detalles de la tradicional caminata, la cual recuerda un acontecimiento que, sin dudas, marcó la vida del más universal de los cubanos.
“Conmemoramos el 143 aniversario del arribo de Martí a Venezuela y el aniversario 171 de su natalicio, en este periplo nos hermanaremos jóvenes venezolanos y representantes de la Misiones sociales en este país”, afirmó.
En viaje desde Nueva York, José Martí llegó a Venezuela el 19 de enero de 1881, a bordo del vapor Felicia, el cual arribó primero a Puerto Cabello y el 21 al Puerto de La Guaira. Una semana después, cumpliría los 28 años el joven patriota.
La tradicional caminata de montaña comienza en el sector Quenepe, Parroquia Maiquetía, prosigue el recorrido a pie de 13 kilómetros de ascenso y luego 10 kilómetros desde Las Cumbres hasta la Plaza Bolívar de Caracas. En pleno siglo 21, se revisita la historia.
“Martí expresaba que le diera Venezuela en qué servirle, que ella tenía en él un hijo, por eso tiene un alto significado esta evocación del suceso; son lazos que nos unen a ambas naciones, escalar una pendiente como esta, y llegar hasta la ciudad de Caracas donde está el monumento erigido a Bolívar, tiene un gran simbolismo”, señaló el dirigente juvenil.
Este camino por las montañas del Wararira Repano, es el que se realizaba en siglos pasados para conectar La Guaira con Caracas, una travesía a pie que duraba aproximadamente entre 6 y 7 horas. “Hay mucha motivación por asistir a este encuentro, en primer lugar, Martí siempre nos une, también la celebración del aniversario 65 del triunfo de la Revolución y el próximo cumpleaños de la Unión de Jóvenes Comunistas”, enfatizó.
Más adelante Miguel Guerra recordó que son caminos muy difíciles, sin embargo será un recorrido inspirador y cargado de emociones. Dijo que cuesta imaginar el enorme esfuerzo que hizo Martí, un hombre de débil complexión física y enfermo para atravesar estos lugares y llegar hasta Caracas, pero la voluntad que caracterizó al más universal de los cubanos, le permitió sortear todas las barreras y cumplir el recorrido.
“Los primeros 13 Kilómetros es una pendiente, de acceso difícil, posteriormente, hay que adentrarse en los cerros de Caracas, luego a partir del kilómetro 21 se desciende, es tan complejo subir como descender, porque ya se trae el agotqamiento del viaje”, explicó Guerra Guerra.
La prédica martiana “A pedir vengo a los hijos de Bolívar un puesto en la milicia de la paz” hoy renace en el corazón y el pensamiento de jóvenes cubanos y venezolanos.
“Él no tenía entrenamiento ni preparación militar o física, pero lo animaba una férrea convicción y una necesidad histórica de llegar a la estatua de Bolívar, Martí constituye la esencia de la Revolución Cubana, es la idea del bien como dijo Fidel, por eso es un gran privilegio y un honor recorrer los mismos parajes por donde él anduvo, es honrarlo y engrandecer la patria americana”, concluyó el líder juvenil.
Detalles en la propuesta radial.