Lo vi por primera vez como novio del personaje de Mónica, en varios capítulos de la hoy antológica serie humorística Friends, donde interpreta un poderoso millonario.
Me resulta difícil este trabajo sobre Jon Favreau, pues incursiona en diversas variantes del cine y la TV. Es, además de actor, guionista, productor y director, con resultados muy favorables. Él podría presumir de lauros tales como el Emy, en diversas ocasiones y el Hugo.
Como actor, su vida profesional comenzó en 1993 con el filme Rudy, al que siguieron Swingers, Very Bad things, Impacto profundo, Daredevil, Iron man (que dirigió y produjo), El lobo de Wall Street, y Chef.
La producción captó su talento, que desbordó en Los vengadores y Spider-man, por solo mencionar dos logros excepcionales.
En la dirección su buen desarrollo no es menor. En 2003 realizó Elf, después vendrían Vaqueros contra aliens, y la nueva versión de El Rey León, saltando muchas de sus obras.
Así llegamos al Mandalorian, con Pedro Pascal a la cabeza del reparto, serie derivada de La Guerra de las Galaxias, donde quién nos ocupa se desempeña como creador, guionista y director. La aplaudida serie continúa en la preferencia de muchos, aclamada por su enorme calidad y total fidelidad al universo de George Lucas.
En 2003 Favreau apareció en uno de los episodios de otra galardonada serie Los Soprano, esta vez interpretándose a sí mismo. Al año siguiente hizo su debut en la dirección con Made que él mismo escribió.
Con su predilección hacia la ciencia ficción puso voz a Pre Vizsla, para la serie de animados Star War, la guerra de los clones.
Sin dudas, Jon Kolia Favreau es un hombre de éxito.