Cuba evoca hoy al Padre de la Patria, Carlos Manuel de Céspedes, y a Raúl Roa, conocido como el Canciller de la Dignidad, cuando se cumplen 204 y 116 años de sus respectivos natalicios.
Miguel Díaz-Canel, Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba (PCC) y Presidente de la República, en Twitter destacó los valores revolucionarios de ambas figuras y agregó en su mensaje la etiqueta #CubaViveEnSuHistoria.
“Un día como hoy nacen el Padre de la Patria en 1819 y el Canciller de la Dignidad en 1907. Céspedes quemó su fortuna en la pira de la #RevoluciónCubana. Roa fundó la diplomacia revolucionaria bajo la guía de #Fidel. Entrega, compromiso, talento y valor”, escribió el mandatario.
El ímpetu, el compromiso, la entrega sin límites, la justicia, la igualdad y la convicción de que no existe nada más importante que defender y amar la patria, son legado y enseñanzas de Carlos Manuel de Céspedes, que fueron destacados en la misma red social por el secretario de Organización del Comité Central del PCC, Roberto Morales Ojeda.
También a propósito de la fecha, Bruno Rodríguez Parrilla, ministro de Relaciones Exteriores, afirmó que el Canciller de la Dignidad, con su verbo filoso y enérgico destruía las mentiras del imperialismo y defendía con intransigencia la soberanía e independencia de Cuba.
“Su ejemplo es savia de la Diplomacia Revolucionaria, siempre fiel a los principios por los que luchó”, agregó en su tuit.
Carlos Manuel de Céspedes (18 de abril de 1819 – 27 de febrero de 1874) se graduó como abogado, además de ser poeta, narrador, periodista, traductor, deportista y promotor de la cultura.
Junto a Francisco Vicente Aguilera y Perucho Figueredo comenzó a conspirar en Manzanillo en septiembre de 1867, y más tarde fundó y presidió la Junta Revolucionaria de ese territorio.
En su ingenio La Demajagua, el 10 de octubre de 1968 Céspedes proclamó su determinación de Independencia o Muerte, y dio la libertad a sus esclavos, lo cual marcó el inicio de las guerras por la independencia de Cuba.
Raúl Roa (18 de abril de 1907-6 de julio de 1982), desde el año 1923 se vinculó al movimiento revolucionario estudiantil que organizó el líder juvenil Julio Antonio Mella, y en 1925 ingresó en la Escuela de Derecho de la Universidad de la Habana.
Escritor y político, desde 1948 fue director de Cultura del Ministerio de Educación, y tras el triunfo de la Revolución cubana (enero de 1959) fue nombrado embajador ante la Organización de los Estados Americanos y luego ministro de Relaciones Exteriores.