Hace 12 años nació “Soñarte”, un proyecto social comunitario alejado del centro de la ciudad de La Habana, ubicado específicamente en la barriada de Las Delicias en el municipio Cotorro. Su fundadora Irma Sehwerert, madre de René González, uno de Los Cinco Héroes, junto a su equipo de trabajo ha permitido que este proyecto sea una vía educativa para transformar conductas en niños, jóvenes y adultos a través del desarrollo de las diferentes manifestaciones culturales. Pero además posibilita el enriquecimiento cultural en una localidad que queda bastante distante de los principales centros culturales de la capital cubana.
En este podcast Encuentro compartimos con el gestor principal del proyecto, Bárbaro Reyes, quien nos acercó a cómo es la realidad del trabajo comunitario.
Soñarte está enfocado en varios grupos etarios, es la esperanza cultural del barrio donde se encuentra, de manera tal que toda la comunidad forma parte de él de alguna u otra manera. Este equipo de trabajo traza sus estrategias sobre la base del diagnóstico de problemáticas sociales, así como de los propios intereses de la comunidad. El cual se realiza a cada cinco años para conocer de manera general hasta lo más específico los intereses y necesidades.
Es necesario tener en cuenta que un proyecto sociocultural no es lo suficiente para para resolver estas problemáticas que se detectan, pero si es una piedra angular para transformar de la mejor manera y con la mejor calidad posible la realidad de los ciudadanos desde el enriquecimiento espiritual que favorece la cultura.
Soñarte se oficializó como proyecto el 13 de agosto de 2010, fecha seleccionada intencionalmente para honrar al líder de la Revolución cubana, Fidel Castro. En sus inicios nació en el patio de varios vecinos, donde se realizaron los primeros talleres de dibujo, teatro y danza, a los cuales cada día se sumaron niños y adolescentes. Cada actividad era propicia para que todos en la comunidad se sintieran parte, hasta que posteriorimente se unieron en una sede que les fue otorgada, y poder de esta manera trabajar para el rescate de los valores.
El vínculo con los factores de la comunidad y organizaciones comunitarias, es también una fortaleza de este proyecto, en los cuales también se pueden disfrutar de manifestaciones como la pintura, el teatro, la música, talleres de barro y ruedas de casino. Según refiere Bárbaro, es muy común ver a los nietos de los abuelos que forman parte del proyecto integrase a las actividades, pero a su vez los que hoy son adolescentes y crecieron en el mismo se mantienen activos.
Es también la sonrisa, el crecimiento y los logros personales de cada uno, que hacen que la gran familia de Soñarte, se sienta realizado con quienes de alguna u otra manera están vinculados al proyecto, o simplemente hoy nos queda su huella. Además de la mayor satisfacción que es la de ser merecedores del respeto y cariño de la comunidad, Soñarte atesora entre varios de sus reconocimientos, el Premio del Barrio, que otroga los Comités de Defensa de la Revolución (CDR), cuando se cumplió en el 2015 el aniversario 55 de la organización de masas.
Le propongo escuchar el podcast Encuentro y conocer los detalles del proyecto sociocultural Soñarte, por medio de su gestor principal Bárbaro Reyes.
En AUDIO, la historia: