Manzanillo, Granma.- Día por día, los amaneceres del joven Alejandro Matos Olivera transcurren en medio del cañaveral, entre el rocío que humedece el rostro y el olor a café recién colado por las cocineras del pelotón de combinada de la cooperativa de producción Agropecuaria Omar Rivero Fonseca, de este costero municipio de la oriental provincia de Granma.
Con 26 años, Alejandro es el más joven del equipo de esa base campesina, única que en el ámbito manzanillero garantiza caña de azúcar para los centrales granmenses que hoy hacen zafra.
“Soy operador – “movedor” (el obrero que traslada la caña desde el campo hasta los centros de acopio) de las combinadas Kase, de esta base productiva. Para mí es fácil porque ya llevo años de experiencia en este tipo de labor.
“He enseñado esta actividad a varios jóvenes, que si la desarrollan como yo, no tendrán problemas. El interés y la dedicación, prestar mucha atención a la distancia entre el carro y la combinada cuando está cortando la caña en medio del campo, la velocidad a la que tiene que ir el tractor, todo decide.
“El único libro que existe en cualquier trabajo es el deseo y el amor que usted le ponga a lo que haga. Me siento bastante cómodo en el trabajo que desempeño y nunca he pensado irme de esta CPA. Empecé aquí manejando un tractor Yung – 80, que lo mantenía bueno y a los dos años me dieron este otro. Aquí renovaron la técnica y la cuidamos y queremos como si fueran nuestras mujeres.”
– Son como una familia en el pelotón…
– “Sí, sí. Nunca se discute fuerte ni nada de eso, ni malas caras ni un sí ni un no, como se dice, porque todos compartimos el mismo objetivo y además estamos más tiempo en el cañaveral, que en la casa. La verdadera familia es esta.
“Este año estamos trabajando un solo turno, sabemos a la hora que salimos de los hogares pero nunca cuándo llegamos. La familia está muy orgullosa y siempre me aconseja que sea disciplinado y responsable en la tarea, que respete a todos mis compañeros y que me esfuerce un poquito más para que cumplamos las metas.”
“La gente está contenta con el salario y la atención al hombre. Tenemos buenas tasas de salario, pero lo que nos golpea es la disposición del transporte para la caña que cortamos, sino fallara nos pagaran un poquito más porque eso sería caña pa´lla y pa´allá.
“Picamos entre 240 y 250 toneladas por día, como norma. Con un buen transporte se “llega” facilito. Me siento feliz y nunca abandonaría mi labor porque es lo que he deseado toda la vida: manejar y trabajar para mi país.”
Por entre las cañas del área El Goteo, de la cooperativa Omar Rivero Fonseca se escurren los primeros rayos del sol, para calentar la fría mañana de un día de enero.
El joven operador Alejandro Matos Olivera enciende el tractor y se dispone al medio del campo, donde sabe es necesario su trabajo para el avance de la zafra azucarera en la provincia de Granma.
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