Durante años los científicos han mantenido una preocupación por el cuidado y desarrollo del cerebro. En el constante indagar los investigadores del mundo coinciden en que el ejercicio, físico y mental, les reportan beneficios a ese órgano por lo que aconsejan realizarlos con sistematicidad.
Ellos consideran que aunque se ha avanzado mucho en los últimos años en su estudio, sigue siendo un órgano misterioso lleno de incógnitas por lo que resolverlas los llena de satisfacción.
Un beneficioso hábito es leer, hacerlo de manera constante, es decir, todos los días; es muy importante, ya que se entrena la imaginación, enriquece el vocabulario y se adquieren nuevos conocimientos.Los expertos añaden otros consejos como juegos lógicos y analíticos, escribir a mano, meditar y comer saludable.
El ejercicio aeróbico se aconseja tambien porque incrementa el flujo de sangre al cerebro y también aumenta el tamaño del hipocampo, la parte del cerebro que participa en la memoria verbal y el conocimiento, consideran los investigadores.
Tienen consenso también sobre que una carrera de diez minutos con intensidad moderada favorece la creación de nuevas neuronas, mejora el aprendizaje, y el tiempo de respuesta del cerebro.
La actividad física facilita la capacidad de razonamiento, e incluso reduce el riesgo de demencia. A cualquier edad no es demasiado tarde para empezar.
El sociólogo estadounidense Paul Dennison, después de tener varias experiencias con sus pacientes que acudían a él por problemas de aprendizaje, expresión, concentración, entre otros, buscó la forma de comunicar las neuronas de las persona-señana un sitio consultado-.
Es así como creo la gimnasia cerebral, la cual logra unir el hemisferio cerebral izquierdo con el derecho provocando así un mayor nivel de concentración, creatividad, mejora de las habilidades motrices y el aprendizaje.
Esta gimnasia para el cerebro se emplea también como una herramienta útil para solucionar problemas de lectura, escritura, dislexia o hiperactividad.
Tocar enérgicamente la rodilla izquierda con el codo derecho y viceversa, activa el cerebro para mejorar la capacidad media, visual, auditiva, kinesiológica y táctil, favorece la concentración, mejora los movimientos ocular y la coordinación -afirma el científico-.
Otro-asegura-. es poner una mano sobre el hombro del lado contrario, apretándolo firme, y girar la cabeza hacia ese lado, respirar profundamente y botar el aire girando la cabeza hacia el hombro contrario. Repetir el ejercicio con el otro lado: se estimula la comprensión lectora y libera la tensión del cuello y hombros.
De igual forma dibujar con las dos manos al mismo tiempo, hacia adentro, afuera, arriba y abajo, estimula la escritura y la motricidad fina
Oro ejercicio es poner una mano en el ombligo y con la otra mano dibujar ‘unos botones imaginarios’ en la unión de la clavícula con el esternón (como hacia el pecho), haciendo movimientos circulares en sentido del reloj: estimula la vista y mejora la coordinación bilateral.
A lo anterior se añade poner la yema de los dedos en las mejillas, simular un bostezo y hacer presión con los dedos: estimula la expresión verbal y la comunicación,oxigena el cerebro, relaja la tensión del área facial y mejora la visión.
Dibujar imaginariamente o con lápiz y papel, un ocho grande ‘acostado’,de manera horizontal: se comienza a dibujar en el centro y se continúa hacia la izquierda, se vuelve al centro y se termina el ocho al lado derecho Sus beneficios son: estimular la memoria y la comprensión.
Poner las manos en las orejas y tratar de “quitarle las arrugas” empezando desde el conducto auditivo hacia afuera estimula la capacidad de escucha,ayuda a mejorar la atención, la fluidez verbal y mantener el equilibrio.
La gimnasia cerebral constituye un aporte más de la ciencia por desentrañar los misterios del cerebro,un órgano al que le falta mucho por descubrirle.