Los estados miembros de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de América-Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP), rechazaron el intento de golpe contra el Estado Plurinacional de Bolivia, perpetrado el pasado 26 de junio, expresaron su apoyo al gobierno de Luis Arce Catacora y al pueblo de ese hermano país, que defendió la democracia alcanzada en las urnas.
Tales pronunciamientos se realizaron durante la X Cumbre Extraordinaria de ese bloque integracionista, que sesionó este miércoles de forma virtual. El foro contó con la participación del Primer Secretario del Comité Central del Partido y Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez.
El mandatario boliviano Luis Arce, quien condujo el encuentro, agradeció la convocatoria especial para esta encuentro que analizó un tema que preocupa a su país.
En sus palabras señaló el alcance nocivo de las redes sociales que con noticias faltas buscan erosionar la confianza de los pueblos en sus gobiernos, denunció los discursos de odio que siembran miedo e incertidumbre, el bloqueo a cualquier proyecto legislativo y los intereses extranjeros sobre importantes recursos naturales como el litio.
Arce relató los sucesos ocurridos el 26 de junio, cuando el ex comandante del Ejército, Juan José Zúñiga, al frente de los tres poderes militares intentó tomar el Palacio Quemado, sede del gobierno. La actitud intransigente del mandatario y su gabinete y del pueblo y los movimientos sociales impidieron el magnicidio.
El Presidente boliviano calificó de gusto el hecho de encontrarse con los miembros del ALBA-TCP para denunciar los intentos que se vienen gestando en América Latina que atentan contra los gobiernos democráticamente electos.
Las primeras palabras del Jefe de Estado cubano, Miguel Díaz-Canel, en la Cumbre Extraordinaria del ALBA-TCP, fueron para expresar solidaridad con las naciones del Caribe que sufrieron severas afectaciones por el embate del huracán Beryl. “Duelen como propias las pérdidas de vidas y los daños materiales causados por el organismo atmosférico”, dijo Díaz-Canel.
“En esa comprensión y en la voluntad histórica de aportar lo que podamos, los colaboradores cubanos que sufrieron los embates del huracán junto a los pueblos donde se desempeñan, se sumaron a los esfuerzos nacionales para asistir a los necesitados desde el mismo inicio de la recuperación. Ningún problema que afecte a la región nos resulta ajeno”.
Miguel Díaz-Canel señaló que las circunstancias que convocan a esta reunión confirman la vigencia y la necesidad de defender con fuerza y determinación la Proclama de América Latina y el Caribe como zona de Paz, que hace una década se aprobó en La Habana durante la Cumbre de la CELAC.
El mandatario puso énfasis en que no se puede permitir que retornen las infames actitudes y acciones golpistas que tan dolorosa memoria sembraron en Nuestra América y que buscan revertir la voluntad popular.
“Es inadmisible- subrayó- que se pretenda atropellar con la fuerza de las armas, el orden constitucional legítimamente establecido”.
El Primer Secretario del Comité Central del Partido afirmó que se debe multiplicar la solidaridad frente la polarización política y la división de nuestras sociedades que promueven los adversarios de la unidad y la integración latinoamericana y caribeña.
“El ALBA-TCP debe estar y seguirá estando en la primera trinchera de esa batalla contra los demonios de la injerencia, el intervencionismo, el neocolonialismo, el espíritu monroísta que, 200 años después de su formulación, sigue marcando la mirada y las acciones del imperio hacia Nuestra América”
En la Cumbre, los jefes de estado y de gobierno, cancilleres y otros dignatarios, ratificaron el categórico rechazo de sus respectivos países a la intentona golpista y reiteraron su apoyo y solidaridad con el gobierno y el pueblo de Bolivia.
El Presidente venezolano, Nicolás Maduro, expresó que Bolivia dio un ejemplo de pundonor y de capacidad de respuesta y en ese sentido felicitó al pueblo “que hizo valer su derecho a la democracia”.
La Cumbre aprobó por unanimidad una resolución, leída por el secretario ejecutivo del ALBA-TCP, Jorge Arreaza, la cual rechazó categóricamente cualquier golpe de Estado o intento, por la modalidad que sea, pues constituyen una amenaza a la democracia, el orden constitucional, la paz y la vida del pueblo.
También ratificó su apoyo irrestricto al gobierno que encabeza el presidente Luis Arce y felicitó al pueblo y a los movimientos sociales del país andino. El texto repudió la actitud manifestada por el presidente argentino, Javier Milei, hacia Bolivia y sus injuriosas expresiones sobre otros países miembros de la alianza.
El documento reafirmó que América Latina y el Caribe continúa siendo una zona de paz, como fue proclamado en la segunda Cumbre de la CELAC celebrada en La Habana en 2014.
Detalles en la porpuesta radial.