Estado de Campeche, México.- Historia, cariño, hermandad, respeto, solidaridad…. esos valores caracterizaron la jornada de este sábado en el estado mexicano de Campeche, con la visita oficial que realiza el Primer Secretario del Comité Central del Partido y Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez.
Desde su llegada al aeropuerto internacional Ingeniero Alberto Acuña Ongay, el mandatario cubano y su anfitrión, Andrés Manuel López Obrador, han cumplido una intensa agenda que se inició en la zona arqueológica de Edzná, maravilloso lugar que atesora la historia y la cultura de la civilización Maya.
En ese sitio que forma parte de la identidad y la cultura de los pueblos guerreros y nobles de nuestra América, el presidente mexicano condecoró al Jefe de Estado cubano con la Orden Mexicana del Águila Azteca, en su grado de Collar, por su labor para fortalecer las relaciones de amistad y cooperación entre Cuba y México.
Al ser condecorado, el Presidente cubano Miguel Díaz-Canel Bermúdez consideró «un altísimo honor recibir la Orden Mexicana del Águila Azteca, condecoración que simboliza el origen, la identidad y la fortaleza de esta entrañable nación».
«La recibo —dijo— con humildad e infinito agradecimiento, consciente de que el auténtico merecedor es el heroico pueblo cubano».
«Reitero mi más profundo reconocimiento, por este significativo acto, al pueblo y gobierno de los Estados Unidos Mexicanos; un pueblo y un gobierno que vemos, con admiración e interés por el amplio proceso trasformador que defienden», subrayó Díaz-Canel.
Antes de la ceremonia de imposición de la alta condecoración mexicana, el presidente cubano intercambió brevemente con la prensa, impresionado por las monumentales edificaciones que representan a la milenaria cultura maya.
«Estamos contentos de estar en México y de estar en este sitio que es parte del patrimonio de América Latina y el Caribe, donde hay tanta voluntad del gobierno mexicano de mostrar esto al mundo», resaltó el dignatario.
Y agregó: «Hoy venimos a dar el abrazo a México por toda su solidaridad».
Luego, los presidentes Díaz-Canel y López Obrador se trasladaron hacia una lde las veinte estaciones del Tren Maya que se construyen en el país. Esta obra monumental, de gran prioridad para el gobierno nacional, recorrerá mil 554 kilómetros y abarcará cinco estados mexicanos: Tabasco, Chiapas, Campeche, Yucatán y Quintana Roo.
Cuarenta y dos trenes confortables y seguros, y 219 vagones conformarán el proyecto que contará con un sistema híbrido, energía eléctrica y diésel, para reducir emisiones contaminantes.
Según la explicación ofrecida a Díaz-Canel por expertos de este megaproyecto, el Tren Maya es actualmente el primer generador de empleos en el sureste mexicano, protegerá la grandeza arqueológica de la región y su construcción tiene una gran responsabilidad con la preservación del medio ambiente.
En esta descomunal obra ferroviaria, que se pretende inaugurar en diciembre de este año, «objetivo que se logrará», como valoró el presidente Díaz-Canel, Cuba participa con la exportación de piedra rajón desde la sureña provincia de Cienfuegos.
Una fuerte lluvia, después de una persistente llovizna durante las primeras horas de la mañana, impidió el recorrido por la zona donde se edifica la estación ferroviaria. Tras recibir la argumentación amplia y pormenorizada acerca del desarrollo del proyecto, el Jefe de Estado cubano destacó la importancia y la trascendencia de esta obra.
Al filo del mediodía, Díaz-Canel y López Obrador se trasladaron a la 7ma Región Naval, donde sostuvieron un cálido intercambio con el personal de la salud del Instituto Mexicano del Seguro Social y representantes de la Brigada Médica cubana.
n estos momentos, la presencia de 610 profesionales de la isla caribeña en 12 estados mexicanos -entre ellos, más de cincuenta colaboradores en Campeche- constituye una clara expresión de la voluntad de ambos gobiernos de continuar fortaleciendo sus nexos bilaterales.
En el emotivo encuentro, el Presidente de México Andrés Manuel López Obrador agradeció al pueblo cubano toda su solidaridad y recordó al Comandante en Jefe Fidel Castro y a todos los líderes y patriotas que hicieron posible la Revolución.
«Mientras los neoliberales estaban impidiendo que se formaran médicos, en Cuba estaban impulsando la formación de médicos y que se consolidara uno de los mejores sistemas de salud del mundo», enfatizó Andrés Manuel López Obrador.
Cuando terminó el intercambio con los profesionales de la salud de ambos países, los participantes salieron fuera de la carpa improvisada para la realización del acto, y de manera informal e individual, hicieron una fila para tomarse fotos con los presidentes de México y Cuba, López Obrador y Díaz-Canel, dos gobernantes comprometidos con el presente y el futuro de sus pueblos.
Escuche y descargue desde nuestro Canal iVoox la propuesta radial.