Fotos: Alejandro Azcuy
Bruselas, Bélgica- Cuando el presidente cubano Miguel Díaz-Canel Bermúdez llegó en la noche de este lunes a la Universidad Libre de Bruselas, un auditorio entero se puso de pie para recibirlo con estremecedores aplausos y coreando fuertemente «Cuba sí, bloqueo no».
«¿Cómo iba a estar en Bruselas y no iba a estar con ustedes?», dijo el mandatario cubano a los participantes en el Festival de Solidaridad Cultural, que se celebró en el contexto de la Cumbre de los Pueblos.
Y entonces, muy emocionado, Díaz-Canel evocó al Comandante en Jefe Fidel Castro: «Ahora cuando estamos aquí, cuando vemos tanta gente joven, tantas personas comprometidas con las causas más justas del mundo, tantas personas solidarias alimentando ese sentimiento de la solidaridad -que es el que tenemos que globalizar en el mundo- estoy pensando en Fidel».
Al hablar a los representantes de la sociedad civil de varios países de las dos regiones, a ambos lados del Atlántico, dirigentes de fuerzas políticas de izquierda y activistas sociales, Díaz-Canel aseguró que era «un honor compartir con ellos esta importante Cumbre de los Pueblos».
«Aquí estamos por principio y convicciones, porque este es un espacio verdaderamente plural, abierto y participativo», afirmó el Jefe de Estado cubano.
En ese sentido, destacó que «este es un sitio de encuentro entre representantes de la sociedad civil, latinoamericana, caribeña y europea. Esta es la mejor de las Cumbres, porque aquí hablan los pueblos».
El mandatario puntualizó que «es aquí donde se promueve un modelo alternativo de desarrollo sostenible, basado en la cooperación y la integración. Un espacio donde decimos no a la exclusión, donde decimos no al consumismo, que degradan y depredan».
«Es en esta Cumbre donde se reclama un mundo más justo y solidario para enfrentar la profunda crisis sistémica del capitalismo, indisolublemente asociada al injusto orden económico internacional imperante. Y es aquí donde los participantes hacen suyo el mayor, más largo y más justo reclamo de nuestro pueblo», significó el Presidente de Cuba.
«Es en nombre del pueblo cubano que agradezco profundamente a la Cumbre de los Pueblos que haya dedicado hoy un taller a la cruel e ilegal política de cerco, acoso y persecución contra Cuba; y que, como resultado de ese taller, se haya acordado convocar a un Tribunal Internacional contra el Bloqueo a Cuba, en noviembre próximo, aquí en Bruselas», precisó el mandatario.
Y agregó: «Estamos seguros que de ese Tribunal saldrá la más contundente denuncia del carácter genocida y criminal del bloqueo, y de la infamia de incluir de Cuba en la espuria lista de Estados supuestamente patrocinadores del terrorismo».
Díaz-Canel dijo que «tratan de aislarnos, de callarnos, de evitar que sigamos denunciando las políticas hegemónicas, de chantaje y castigo contra los que no se someten con dignidad».
«Nadie debe esperar que bajemos los brazos, que nos arrodillemos a pedir perdón por defender el derecho a la diferencia», aseguró el Jefe de Estado.
En su vibrante intervención, el Presidente cubano ratificó que «Cuba rechaza firmemente las agresiones imperiales contra los procesos progresistas y de izquierda de América Latina y el Caribe».
De igual manera, reiteró el agradecimiento del pueblo cubano a las innumerables muestras de solidaridad con Cuba a nivel mundial, durante todos estos años de Revolución.
«Una vez más, en nombre del pueblo cubano, les agradezco por las permanentes acciones de solidaridad que desarrollan las fuerzas políticas, movimientos sociales y populares, pacifistas, sindicales, estudiantiles, campesinos, de mujeres, juveniles, religiosos y los cubanos patriotas residentes en el exterior».
«La solidaridad seguirá siendo un arma indestructible de lucha y al mismo tiempo un mensaje permanente e inagotable de paz, imposible de acallar».
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En este espacio, donde se alzó la verdadera voz de los pueblos, estuvieron presentes, además, los Presidentes de Bolivia, Luis Arce; y de Colombia, Gustavo Petro; así como la vicepresidenta venezolana Delcy Rodríguez.