MOSCÚ, Federación de Rusia- Cuba y Rusia mantienen una relación a prueba del tiempo, repleta de numerosos simbolismos, que consolidó sus mayores fortalezas a partir del triunfo de la Revolución Cubana.
El Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz impulsó el restablecimiento de las relaciones diplomáticas, que se concretó el 8 de mayo de 1960, en consideración a la amistad sincera entre ambos pueblos, el respeto mutuo y la coincidencia en los intereses compartidos en función del desarrollo económico y social.
Esos vínculos se fortalecieron progresivamente hasta llegar a la asociación estratégica que los dos países han sido capaces de consolidar, con un activo diálogo político al más alto nivel y la coincidencia en los principales temas de la agenda internacional.
A 64 años de que la isla caribeña y el gigante euroasiático trazaran un nuevo camino en sus nexos, regresa a Moscú el Primer Secretario del Comité Central del Partido y Presidente de la República Miguel Díaz-Canel Bermúdez, en medio de una complicada situación global, pero con la convicción de que ambas naciones están comprometidas con la defensa plena de su soberanía e independencia, así como con el derecho a garantizar la seguridad y construir su propio destino.
En pleno siglo XXI, los vínculos entre la Federación de Rusia y Cuba son excelentes y están basados en los tradicionales lazos que unen a ambos países. Se ha mantenido un intercambio y diálogo político al más alto nivel, que ha sido fructífero y útil para impulsar los vínculos bilaterales en las áreas de interés mutuo.
Altos funcionarios gubernamentales de ambos países han calificado las relaciones bilaterales como «estratégicas y con un potencial de desarrollo extraordinario». Esos nexos cuentan con una alta prioridad otorgada por ambos gobiernos.
Las relaciones de Cuba y Rusia han sido consideradas, en varias ocasiones, por el Presidente Díaz-Canel, como «un ejemplo para el mundo entero de los vínculos entre una gran potencia y una pequeña isla, donde priman nexos de pueblos y de amistad».
Fuertes y perdurables son los afectos que unen a ambos pueblos, sentimientos entrañables que sobreviven al tiempo y acompañan diversos espacios de las geografías cubana y rusa.
Este 8 de mayo, el Presidente de la República está nuevamente en Moscú; y su cuarta visita como mandatario coincide con el aniversario 64 del restablecimiento de relaciones bilaterales.
Durante la jornada, Díaz-Canel también participará en el Consejo Supremo Económico Euroasiático, que es la reunión de mayor nivel de la Unión Económica Euroasiática (UEEA), importante bloque de integración económica regional, que dentro de unos días arribará a su décimo aniversario.
Desde el 11 de diciembre de 2020, Cuba es el único país de América Latina y el Caribe que ostenta la condición de Estado observador, y será la primera vez que el Presidente cubano participe de forma presencial en su Consejo Supremo.
En las relaciones entre Cuba y la Unión Económica Euroasiática existen amplias potencialidades de cooperación, y se ha puesto especial énfasis a temas claves para el desarrollo como la salud, la industria biotecnológica y farmacéutica, la agroindustria, el turismo, la energía y la informatización de la sociedad.
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