El Centro de Diagnóstico Integral “Libertad” del municipio Machiques de Perijá, en el Estado venezolano de Zulia es una de las instituciones médicas muy cercanas a la frontera con Colombia.
Un CDI cuyas condiciones estructurales no son las más favorables, desde filtraciones en los techos hasta locales que requieren de una urgente reparación capital.
Los integrantes de la Brigada Médica cubana que allí laboran desafían cada día esta compleja situación, caminan kilómetros para llegar a su puesto de trabajo y atender con amor al pueblo venezolano que tanto los necesita en una región donde habita gente muy humilde.
La Doctora Iris Mercy González Fernández, procedente de la provincia de Guantánamo está al frente del colectivo y habla con absoluta convicción.
“A pesar de las dificultades que enfrentamos cada día y las complejas condiciones estructurales, estamos concentrados en el trabajo, y en dar cumplimiento a nuestro objetivo esencial, que es brindar una atención con calidad al pueblo venezolano”, puntualizó.
Sobre los servicios que se ofrecen, explicó que “en estos momentos prestamos servicios de oftalmología, rehabilitación, logopedia, podología, enfermería y laboratorio”.
Todos los servicios son muy demandados por el pueblo, especialmente la Sala de Rehabilitación por la cantidad de pacientes que se reciben con accidentes cerebro-vasculares, parálisis faciales, sacrolumbalgias, también niños con problemas en el habla y en su desarrollo sicomotor, entre otros padecimientos; y como elemento positivo resaltó que muchos se restablecen de inmediato con la atención y profesionalidad recibidas.
La estrecha unión y hermandad con los trabajadores venezolanos que laboran en el centro es otra de las claves para alcanzar los resultados esperados. El Licenciado en trabajo social Fernando Jiménez, camarero, siente mucho placer por un trabajo vestido de sensibilidad.
En diálogo con la prensa manifestó orgulloso “Ya llevo 17 años laborando aquí día y noche, tenemos vocación, es mejor dar y no recibir, cuando vemos al paciente que se va alegre y sano es el mejor pago que recibimos, los médicos cubanos vienen a traer lo que tienen, que es su corazón, dan mucho más que amor”.
LA Doctora Iris Mercy ratifica el compromiso y el orgullo por lo que hacen, aún en medio de difíciles condiciones, porque reciben cada día muestras de afecto de quienes llegan al CDI en busca de una mejor calidad de vida.
“Todos los habitantes de la zona están muy satisfechos con el servicio que nosotros prestamos a la población y se sienten muy bien atendidos por la misión médica cubana; nosotros felices por estos impactos y por nuestra contribución a una mejor calidad de vida”, significó.
Mientras hacíamos nuestro reporte, dialogamos con Zoila Caldera y Eligia Guevara, dos pacientes agradecidas, que corroboraron esos criterios.
“Siempre nos recomiendan a los médicos cubanos, que son excelentes, por eso he venido aquí, me están dando fisioterapia en la pierna, que ya se me restablece”, dijo Zoila.
Entretanto Eligia nos dice muy emocionada: “Doy gracias al Señor por tenerlos aquí, también a nuestro Gobierno, todos los pacientes vienen aquí porque esta Brigada es muy profesional”.
Por eso la Jefa del CDI expresa que es quizás, el amor, la ruta de un colectivo que no ceja en el empeño de dar más cada día en el empeño de servir a los hermanos. Y reafirma con absoluta convicción: “Nos sentimos bien, somos una familia y trabajamos con una enorme satisfacción, con mucho sentido de pertenencia, por la salud del pueblo”.
Detalles en la propuesta radial.