Reduce el consumo de energía con estos trucos y mejora el tiempo al cocinar en tu casa
- Cuanto más finas sean las porciones de alimentos que congelamos, más rápido se congelarán –menos riesgo de patógenos- y se descongelarán, además de ocupar menos espacio en el congelador.
- Pica un montón de ajo y cebolla de una vez –puedes usar una picadora, si tienes– y congélalos. Cada vez que necesites hacer un sofrito base para cualquier plato, estarán allí, listos. Nos ahorrará tiempo.
- Si necesitas rallar quesos blandos para gratinarlos en una capa fina, ponlos por lo menos una media hora antes en el congelador para que tengan una textura más manejable.
- ¿Has comprado tomillo, orégano o salvia frescos para preparar un plato y te ha sobrado bastante? Córtalos, ponlos en una cubitera, cúbrelos con aceite y congélalos. La grasa favorecerá una buena conservación de la humedad de las hierbas, y te ahorrarás volver a tener que comprar un manojo entero la próxima vez que una receta te los pida. Además de mejorar otros platos cuando improvises y recuerdes que tienes a mano esa bomba de sabor.
- Para preparar palomitas lo ideal es usar granos de maíz bastante frescos, de lo contrario tardarán mucho en explotar, o no lo harán (y se quemarán antes). Si tienes antojo pero tu maíz lleva ya un tiempo guardado, remoja los granos en agua durante 10 minutos y escúrrelos bien antes de preparar las palomitas. Quedarán perfectas.
- Para sacar más zumo de esos limones o limas tan duros que parecen más un arma arrojadiza que una fruta, hazlos rodar unas cuantas veces sobre la encimera o una mesa presionando con la palma de la mano.
- El aceite no solo sirve para cocinar: si engrasas una cuchara antes de medir ingredientes pegajosos como la miel, no solo la limpiarás más rápido sino que además las medidas serán más ajustadas. Este truco también funciona con los cuchillos cuando se van a cortar cosas pegajosas y con el rallador para los quesos más grasos.
- Si acabas de lavar el colador y necesitas usarlo para tamizar ingredientes secos, usa el secador de pelo. El aire caliente es mucho más efectivo que los paños de cocina, que no eliminarán la humedad del todo, lo que haría la harina, el cacao o el azúcar glas se quedaran pegados.
- El plátano se pela muchísimo mejor desde la base. Da igual si está muy maduro –al intentar romper la punta para abrirlo, siempre se aplasta– o demasiado verde, cuando la punta no se parte ni aunque seas cinturón negro. Corta un poco el botón negro que hay justo al otro lado conseguiremos sacar fácilmente la cáscara en tiras y el plátano entero.
(Escrito por Rosa M. Cubela) / Revista Bohemia