Casi el 80 por ciento de las 27 especies de aves endémicas determinadas en Cuba están reportadas en el Parque Nacional Alejandro de Humboldt (PANH), reveló un inventario de avifauna silvestre concluido en el año 2022 por investigadores del Centro provincial de Servicios Ambientales y Tecnológicos (CESAT).
Ese guarismo es una fortaleza y oportunidad para potenciar la conservación de la diversidad ornitológica en el área protegida más importante del país, subrayó el biólogo Gerardo Begué Quiala, al frente de la pesquisa realizada en las montañas de los municipios de Sagua de Tánamo y Moa (Holguín), y Manuel Tames, Yateras y Baracoa (Guantánamo).
La sorprendente riqueza de la avifauna en el PNAH, sitio natural del Patrimonio Mundial declarado por la UNESCO en 2001, es de cardinal importancia para desarrollar la modalidad turística de observación de pájaros, la cual generaría significativos ingresos económicos al oriental territorio, destacó el también subdirector del CESAT.
En las 11 expediciones de campo desarrolladas durante tres años con períodos de cinco a siete días, el equipo científico evaluó los criterios del estado de las especies y entre los métodos de conteo utilizó los puntos fijos, bandas de transectos, reproducción de sonidos grabados (Play Back) y la captura con redes de niebla.
La compilación confirmó que el Gavilán Caguarero (Chondrohierax wilsonii) es el mayor amenazado de extinción y por ello está reportado con categoría de Peligro Crítico para Cuba y la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza y los Recursos Naturales.
Aunque el ave de rapiña vivió desde tiempos remotos en la Ciénaga de Zapata, el río Cauto (Granma) y Guamá (Santiago de Cuba), en estos momentos está confinado sólo a los territorios de Guantánamo y Holguín, con reportes de su presencia en las zonas de Tribilín, Los Lirios, El Zapote de Mal Nombre y San Rafael (Yateras).
Sobre el pájaro Carpintero Real (Campephilus principalis), avistado en Cuba por última vez en el Departamento de Conservación Ojito de Agua, en 1987, el inventario reportó probables nidos y huecos abandonados como evidencias indirectas.
Aunque desde el año 2015 no se planifican expediciones para la búsqueda del también conocido como Carpintero Pico de Marfil, no es recomendable asumirlo extinguido porque las organizaciones científicas internacionales sólo aplican esa condición cuando no es avistado en los últimos 50 años.
Las principales deducciones del renovado registro ornitológico fueron publicadas en la revista digital Cub@: Medio Ambiente y Desarrollo (Volumen 22, Número 43, julio-diciembre de 2022), editada por la Agencia de Medio Ambiente (AMA), rectora de 22 organismos con centros de investigación, de servicios científicos y tecnológicos, unidades de Desarrollo e Innovación y Jardines Botánicos de todo el país.
(Fuente: Agencia Cubana de Noticias)