Un alto funcionario de Hamás acusó a Israel de revocar unilateralmente el acuerdo de alto el fuego que comenzó el pasado 19 de enero, con reportes de que el grupo palestino tiene con vida a 24 rehenes capturados en el ataque del 7 de octubre de 2023, así como los cuerpos de otros 34.
Los ataques israelíes de esta noche contra la Franja de Gaza han causado la muerte de más de 200 personas, informa Al Jazeera, al citar a autoridades locales.
Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) afirmaron haber recibido órdenes de aplicar medidas de fuerza contra Hamás después que el grupo, según afirmaciones de Tel Aviv, se negara a liberar a los rehenes.
Medios de comunicación palestinos informaron que entre los muertos hay miembros de alto rango de Hamás, el jefe de operaciones internas en Gaza y el viceministro de Interior del movimiento.
Por su parte, la portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, afirmó que Tel Aviv había informado previamente a Washington de los ataques aéreos.
Según cita The Times of Israel, las fuerzas de Tel Aviv tienen la intención de continuar los ataques aéreos «tanto tiempo como sea necesario», y están dispuestas para ampliar el asalto más allá de una campaña aérea si así se les ordena. En ese orden, aseguran estar desplegadas y preparadas en todos los frentes, incluida la alerta reforzada de sus defensas aéreas.
Más de 400 muertos
Según la agencia AP, Israel lanzó una oleada de bombardeos en toda la Franja de Gaza y mató al menos a 404 palestinos, incluidos mujeres y niños, según funcionarios hospitalarios.
El Ejército israelí ordenó a la gente que evacuara el este de Gaza, incluida buena parte de la localidad norteña de Beit Hanoun y otras comunidades más al sur, y se dirigiera al centro del territorio, un indicativo de que Israel podría reanudar las operaciones terrestres.
El ataque durante el mes sagrado musulmán del Ramadán podría reanudar los combates en una guerra que ya ha matado a decenas de miles de palestinos y causado una destrucción generalizada en Gaza. También planteó preguntas sobre el destino de una veintena de israelíes retenidos por Hamás que se cree que aún están vivos.