Este viernes, el expresidente Donald Trump fue sentenciado a una “libertad incondicional”, una condena que es muy poco frecuente que complica su status como convicto antes de su toma de poder.
Con esta sentencia, se evitará tiempo en prisión, así como libertad condicional o sanciones económicas.
El presidente electo compareció en la audiencia a través de una videollamada. “Esto ha sido una experiencia muy terrible”, expresó durante su intervención.
“Donald Trump, el ciudadano común, Donald Trump, el acusado criminal” no tendría derecho a las protecciones de la presidencia, afirmó el juez Juan Merchan. Tras la sentencia dictada, Trump guardó silencio.
El pasado año, Trump fue declarado culpable de 34 delitos graves de falsificación de registros empresariales para encubrir un escándalo sexual, ocultando pagos de más de 100,000 dólares a la actriz porno Stormy Daniels para que guardara silencio y no lo perjudicara en las elecciones presidenciales de 2016.
La sentencia de hoy convierte a Trump en el primer exmandatario condenado por cargos criminales y el 20 de enero se convertirá en el primer expresidente electo con sentencia firme que asume.
La sentencia ha sido muy poco común y casi simbólica, «libertad incondicional». Representa que no habrá ni prisión ni sanciones.
El presidente electo se había propuesto regresar a la Casa Blanca sin marcas legales, pero eso no será imposible. Todavía cabe un recurso de apelación contra la decisión judicial, pero eso tomará algún tiempo y en esa fecha ya Trump será presidente.