La República Bolivariana de Venezuela celebró uno de los acontecimientos más grandes de la historia americana.
El Presidente Nicolás Maduro Moros lideró el acto en conmemoración del Bicentenario de la Batalla de Ayacucho, desde la Plaza Monumento que lleva el nombre de ese suceso, en el Paseo de los Próceres, en Caracas, y destacó que “es un día muy especial para todos los pueblos de Nuestra América”.
Recordó que el 9 de diciembre de 1824 “en un solo campo, América del Sur, las tropas dirigidas por el Gran Mariscal Antonio José de Sucre, de manera magistral, derrotaron lo que para entonces era el ejército más poderoso del Planeta Tierra, el Ejército Español, y con ese gran triunfo sellaron para siempre la victoria de la liberación de nuestro continente de tres siglos de despiadado y criminal colonialismo.
Enfatizó que hace 200 años se selló el destino de la América “ese destino nos marca por ahora y para siempre, somos el pueblo de los vencedores de Ayacucho, somos los vencedores de todos los tiempos, de todos los siglos”, significó.
Más adelante reafirmó un compromiso: “seremos como Ayacucho, seremos como Sucre, esta patria seguirá su rumbo de patria libre, independiente, pacífica, soberana y de pueblo unido”.
Maduro también otorgó la condecoración Bicentenario de la Batalla de Ayacucho a un grupo de funcionarios públicos que fueron agredidos con recientes sanciones ilegales del gobierno de Estados Unidos.
En su cuenta en la red social Telegram, el dignatario destacó que hoy es el gran día en el que, con orgullo, el pueblo bolivariano celebra el Bicentenario de la Batalla de Ayacucho, “esa heroica epopeya que tuvo lugar allá en la Pampa de la Quinua, Perú, en la que nuestro Ejército Libertador, al mando del Gran Mariscal Antonio José de Sucre, liberó definitivamente a América del yugo español, un momento cumbre de nuestra historia que perdura por siglos”, escribió el dignatario.
El Jefe de Estado recordó la hazaña y significó que los próceres hilvanaron la proeza, “única en la historia de la humanidad, de construir ejércitos populares y forjar Repúblicas, echando de estas tierras al imperio colonial que sumergió el continente en siglos de oscuridad”.
Maduro calificó Ayacucho como momento cúspide de la guerra de independencia de Suramérica contra el imperio español y consideró que con esa misma pasión, “nuestro pueblo libertario mantiene su espíritu permanente de lucha y conciencia patria, siendo leales defensores de la libertad, hermandad y la integración de todas las naciones de nuestra Patria Grande”.
Entretanto, en horas de la mañana de la jornada, autoridades venezolanas depositaron una ofrenda floral en un acto cargado de simbolismo, realizado en el Mausoleo al Libertador, en el Panteón Nacional, donde descansan los restos del General Simón Bolívar y de otras grandes personalidades de la historia de la nación.
El Vicepresidente Sectorial de Política, Seguridad Ciudadana y Paz, Diosdado Cabello, expresó en las palabras centrales del tributo, que la Batalla de Ayacucho demostró la relación que se construyó entre Antonio José de Sucre y Bolívar en aras de los ideales independentistas.
“Un honor estar aquí 200 años después de Ayacucho, 200 años de historia, de gloria; hablar de Ayacucho es hablar de Bolívar y Sucre y de esa extraordinaria relación que entre ellos se construyó al calor de las luchas más sentidas por la independencia patria, por sentir pueblos libres, con el corazón libre, al calor de las ideas que eran sometidas por quienes se consideraban los dueños del mundo para aquella época el imperio español”, señaló.
“Cada intento por recuperar los sueños del Padre Bolívar era derrotado hasta que, en el año 1998, llegó a la presidencia un joven de Sabaneta de Barinas y con él se levantaron los sueños de Bolívar y de Sucre”, subrayó Cabello.
También el Ministro del Interior, Justicia y Paz; y Primer Vicepresidente del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), dio lectura al escrito Una bandera en Ayacucho, del entonces alférez Hugo Chávez, quien visitó junto a otros militares de la región el sitio histórico en Perú hace 50 años.
A la vez, en esta evocación del pasado de gloria, Diosdado Cabello difundió una emotiva carta cargada de fuerza que le enviara Sucre a Bolívar. A 200 años de aquella gesta, hay que beber de esa savia, dijo.
En ese sentido puntualizó “Se enfrentaban al Imperio español, el imperio más poderoso de aquella época, 200 años después, los hijos de Sucre, de Bolívar, de Chávez enfrentamos al imperio más poderoso de todos los tiempos y no tengo dudas de que, como ellos hicieron en Ayacucho, levantaremos esas banderas que también enarboló Chávez cuando iba en ese caballo blanco, la bandera de la libertad, la banderas de las luchas de los pueblos libres”, enfatizó.
Asimismo, mediante sus redes sociales, la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América conmemoró el Bicentenario de la Batalla de Ayacucho, definitiva para la independencia de América del Sur, además de que logró el final del dominio español en el continente, ya que neutralizó los últimos bastiones realistas presentes en la región, destaca el comunicado del ALBA-TCP difundido en las redes sociales.
El documento expresa: “En este día, rendimos homenaje a los valientes patriotas que, a través de su sacrificio y determinación, forjaron un futuro de libertad y soberanía para las naciones latinoamericanas”, declaró el organismo.
La batalla se libró en la Pampa de la Quinua, Perú; y el bando patriota de Gran Colombia fue comandado por el Gran Mariscal de Ayacucho, Antonio José de Sucre; y a pesar de la superioridad numérica y material, los independentistas lograron con su arrojo la capitulación definitiva del ejército realista, y la independencia incondicional de Perú, una luz para la libertad de nuestros pueblos de América.
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