gestión de gobierno 21 octubre

Siete días en la agenda de Gobierno

Por: Yaima Puig Meneses

Sumamente tensa ha sido la situación electroenergética durante la pasada semana en Cuba: las dificultades que desde hace varios meses se han venido enfrentando con el abastecimiento del combustible necesario para la generación, se agudizaron en los últimos siete días, provocando serias afectaciones en el suministro de energía eléctrica.

Pocos minutos después de las once de la mañana de este viernes se produjo el punto clímax, cuando la abrupta salida de la termoeléctrica Antonio Guiteras llevó a una caída total del Sistema Electroenergético Nacional (SEN).

Constante ha sido el seguimiento dado a ese complejo escenario por la máxima dirección del país, con el Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista y Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, al frente desde el minuto cero.

A partir de visitas al Despacho Nacional de Carga de la Unión Eléctrica, reuniones de chequeo y otras múltiples acciones, se han ido evaluando y redireccionando cuando ha sido necesario, las operaciones que se llevan a cabo para avanzar en el proceso paulatino y seguro de restauración del servicio eléctrico de manera total.

Vital ha sido en ese propósito la habilitación de “islas” con motores de la generación distribuida para hacer llegar el fluido eléctrico a unidades termoeléctricas, así como el suministro de combustibles a las plantas de la generación distribuida y de generación móvil (patanas). En todas las provincias, desde el propio viernes, aunque de forma mínima, se empezó a brindar energía en determinadas áreas del sector residencial y de los servicios básicos.

Trabajo intenso y apoyo de todos son esenciales para poder superar la actual situación, que al concluir la semana seguía siendo todo un desafío para quienes están implicados en su solución.

Lo sucedido —valoró el Jefe de Estado cubano en una de las reuniones de trabajo realizadas por estos días en el Palacio de la Revolución— es una “demostración más de todos los problemas que nos causa el bloqueo, y de sus impactos”, hay quienes dicen incluso, subrayó, que todo lo que se dice es “teque”, pero aquí está otra vez su impacto.

Acceso a los combustibles, reparaciones postergadas y otros múltiples hechos, son reales, y tienen sus principales causas en que Cuba carece de la divisa necesaria, debido a la persecución financiera y también energética que implica el recrudecimiento del bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por el Gobierno de los Estados Unidos.

Sobre esas causas había explicado a nuestro pueblo el miembro del Buró Político y Primer Ministro, Manuel Marrero Cruz, en una comparecencia especial que llevó a cabo junto a directivos del Ministerio de Energía y Minas el pasado jueves, poco antes de que el país llegara al estado de generación cero.

A esa ya de por sí complejísima situación que vivía Cuba, a finales de la semana se sumó el previsible impacto al territorio nacional del huracán Oscar, un fenómeno meteorológico pequeño y con vientos de 130 kilómetros por hora, pero que se estima puede provocar varias afectaciones en las provincias orientales.

La evolución de ese evento climatológico, así como las puntualización de las acciones que se ponen en marcha para minimizar tanto como sea posible sus daños, estuvieron igualmente presentes en el transcurso de los últimos “Siete días en la agenda de Gobierno”.

Indicaciones precisas transmitieron tanto el Presidente de la República como el Primer Ministro, en los diferentes encuentros de trabajo llevados a cabo. De manera general estuvieron asociadas, entre otros temas, al cumplimiento de las medidas para proteger a la población y a los recursos materiales; la información oportuna a nuestro pueblo, empleando para ello todas las alternativas posibles, así como a la organización, de forma previsora, de las acciones de recuperación una vez que Oscar deje de ser un peligro para Cuba.

HACER POR CUBA DESDE LO LOCAL

Para evaluar, a nivel local, cómo marcha la implementación de las Proyecciones de Gobierno para corregir distorsiones y reimpulsar la economía, el Primer Ministro inició en la última semana una serie de encuentros de trabajo con los consejos provinciales de Guantánamo y Santiago de Cuba, que poco a poco se irán concretando en todo el territorio nacional.

Justamente la producción de alimentos es un tema clave en ese Plan de acciones anunciado a finales del pasado año. Dando seguimiento a ese particular, el miembro del Buró Político y vicepresidente de la República, Salvador Valdés Mesa, cumplimentó una agenda de trabajo de dos días en la provincia de Ciego de Ávila, donde evaluó la marcha de programas determinantes como el de cultivos varios, el arrocero y el de pesca, así como los preparativos para la próxima zafra azucarera.

De esas prioridades se debatió también con profundidad en la sede del Parlamento cubano en la última semana. Fueron dos los escenarios de ese análisis: el primero de ellos la más reciente reunión del Consejo de Estado, y el segundo, un encuentro de trabajo en el cual se examinaron los principales indicadores del programa de estabilización macroeconómica del país.

Es nuestra misión como representantes del pueblo —dijo el miembro del Buró Político y presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular y del Consejo de Estado, Esteban Lazo Hernández—, aportar desde el pensamiento y el actuar colectivo, frente a los desafíos que impactan hoy en el desarrollo de la economía cubana

Una semana de retos multiplicados ha vivido Cuba en los últimos días: los que están por venir tal vez no lo serán menos; y para hacerles frente, la entrega y el heroísmo de nuestro pueblo serán determinantes, como ha sucedido siempre.

Escuche y descargue la versión radial de Angélica Paredes López

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