Las limitaciones financieras para adquirir trigo y harina de trigo y los visibles obstáculos que ocasiona a la economía nacional, el bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por el Gobierno de Estados Unidos de América desde hace más de seis décadas a Cuba, impactan directamente en la disponibilidad de estos productos en el país, afirmó hoy la Directora de Política Industrial del Ministerio de la Industria Alimentaria (Minal) Anayra Cabrera Laza.
Aseguró que ante las actuales condiciones se adoptaron medidas urgentes en el sector, con el objetivo de garantizar el pan de la población, y que incluyen la momentánea elaboración del producto de la canasta familiar normada, ahora con un peso de 60 gramos y un precio inferior al habitual, que será de 75 centavos.
Las acciones explicadas en la sede del Minal, con el fin de mitigar en lo posible esta situación, priorizan la gestión y aseguramiento de harina producida por la industria, así como de la inserción de harina en otras modalidades.
Sayli Pérez Hernández, Directora Comercial de la Empresa cubana de Molinería, explicó que están los mecanismos creados en las provincias y se activaron los sistemas de trabajo con el resto de los organismos que intervienen en esta cadena en el país, para asegurar la producción y la transportación de productos.
«Queremos ratificar que estamos trabajando de manera inmediata y responsable en este sentido, con la prioridad y agilidad que requiere tan vital proceso en Cuba», subrayó.
Sobre este desafío intervino además Maidel Linares, vicepresidenta primera del Grupo Empresarial de la Industria Alimentaria.
Detalló a la prensa las iniciativas con otros organismos y actores económicos no estatales, en base a a alianzas y encadenamientos que permitan dar continuidad y estabiliada a las coberturas de materia prima.
Asimismo, la vicepresidenta primera del Grupo Empresarial de la Industria Alimentaria resaltó que la cadena cubana del pan -una de las empresas imprescindibles para la población – continuará prestando el servicio de venta de pan liberado ante el actual escenario.
En los minutos finales llegó el mensaje oportuno para la población del Ministro de la Industria Alimentaria Alberto López Díaz: » La disminución del gramaje del pan que se elaborará a partir de ahora en Cuba, no significa para nada afectar la calidad del producto y por ello hemos desplegado un sistema de trabajo y control que vele por el cumplimiento de normas y procedimientos a tales efectos».
«Existe compromiso, voluntad y responsabilidad de los trabajadores de la Industria Alimentaria para la producción y distribución de alimentos a la población ante el actual escenario», concluyó.
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