El líder de la Revolución, General de Ejército Raúl Castro Ruz, y el Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba (PCC) y Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, encabezaron este viernes, en Sancti Spíritus, el acto nacional por el aniversario 71 del asalto a los cuartes Moncada y Carlos Manuel de Céspedes.
La Plaza de la Revolución Mayor General Serafín Sánchez Valdivia devino escenario de la conmemoración histórica, a la cual asisteron miles de espirituanos, en representación del pueblo de Cuba.
En la celebración del Día de la Rebeldía Nacional participaron, además, integrantes del Buró Político y del Secretariado del Comité Central del PCC, dirigentes de organizaciones de masas, miembros de los Consejos de Estado y de Ministros, autoridades de la provincia espirituana, protagonistas de las acciones del 26 de julio de 1953 y familiares de mártires de aquella epopeya.
Al acto nacional asistieron, igualmente, más de 130 amigos de la Revolución, entre ellos miembros de la brigada europea José Martí de trabajo voluntario y solidaridad con Cuba, de la Juan Rius Rivera, de Puerto Rico, así como de la Sociedad Cultural José Martí, de Estados Unidos, quienes concurrieron a un encuentro de solidaridad internacional con la isla caribeña, celebrado este 25 de julio en la Universidad de Ciencias Médicas.
Al Mayor General Serafín Sánchez Valdivia, prócer insigne de Sancti Spíritus, se dedicó el primer bloque del acto, que recrea artísticamente la batalla del Paso de las Damas, donde perdió la vida el paladín de los espirituanos el 18 de noviembre de 1896.
Este 26 de Julio en la Plaza se vuelve a sentir aquel emocionante capítulo de la historia de Cuba: al terminar el desigual combate y, una vez cumplido el objetivo, Serafín ordenó la retirada. En ese momento, una bala de máuser lo atravesó y cayó en brazos de José Inés Fernández. Quienes fueron a socorrerlo alcanzaron a escuchar sus últimas palabras: “¡Me han matado! ¡No importa, que siga la marcha!”. Desde entonces la icónica frase acompaña a los espirituanos y se ha convertido en imperativo para seguir adelante en las más complejas circunstancias.
La historia de 510 años de la región es ensalzada en el acto por el Día de la Rebeldía Nacional, momento propicio para rendir culto a la llamada “espirituanidad”.
El recorrido iconográfico, con imágenes que van desde el pasado hasta la contemporaneidad, apela a lo más genuino de la idiosincrasia yayabera, esa cualidad intangible que tiene su máxima expresión en el clásico Pensamiento, la canción de Teofilito que hace suspirar a medio mundo y, en los acordes del Septeto Espirituano, ha emocionado a los miles de espirituanos presentes en la Plaza. “Dile que pienso en ella”, es un verso que provoca las más íntimas evocaciones en el pueblo que colma la Plaza.
Para resumir el quehacer de los espirituanos, protagonistas de esta jornada de esfuerzo decisivo, Deivy Pérez Martín, miembro del Comité Central del Partido y primera secretaria de la organización política en la provincia, pronunció un emotivo discurso en el que resalta la consagración del pueblo: “Sancti Spíritus, muy bien lo sabemos todos, es tierra de mambises, de rebeldes que continuarán siempre aquella marcha”.
Sancti Spíritus, como el resto del país, no está exenta de complejidades, a las que nos sobreponemos día tras día, bajo el concepto de resistencia creativa, desarrollando un sistema de trabajo que estimula el vínculo directo y sistemático con la base.
Pérez Martín ejemplificó las acciones constructivas que han permitido mejorar la infraestructura y los servicios de sectores como educación, salud, cultura, deporte, turismo, agricultura, comercio,
Foto: Estudios Revolución.
Tras asegurar rotundamente que los espirituanos no le fallaremos nunca a la Revolución, la secretaria del Partido en el territorio sostuvo: “Aquí se puede hablar de patriotismo, aquí se puede hablar de firmeza, aquí se puede hablar de heroísmo, aquí se puede hablar de valentía, aquí se puede desafiar todos los riesgos, todos los peligros, aquí se puede hablar de dificultades, como se puede hablar a lo largo y ancho de nuestra patria, sin temor a ninguna de ellas.
El momento es difícil, pero la historia que le antecede es aleccionadora, tan inspiradora, tan heroica, que ella solo responde a todas las interrogantes con la siempre desafiante frase con la que el General de Ejército nos enseñó a enfrentar las dificultades: ¡Sí se puede!.
Al concluir las palabras de la secretaria del Partido en Sancti Spíritus, se dedicó un sentido homenaje a Alberto Delgado, con la interpretación del tema El Hombre, de Silvio Rodríguez, por Nelson Valdés, Eduardo Sosa y María Victoria.
Foto: Alien Fernández.
Salvador Valdés Mesa, miembro del Buró Político del Partido y vicepresidente de la República, tuvo a su cargo las palabras centrales del acto por el Día de la Rebeldía Nacional, momento de especial significación en el que, a nombre de la dirección del Partido, el Gobierno y de todo el pueblo, felicita a las espirituanas y espirituanos por tanto esfuerzo y, especialmente, por sus resultados.
En su discurso, el vicepresidente cubano señaló: “Cualquier persona honesta, incluso si no comparte nuestras ideas, comprende que el bloqueo recrudecido, junto al resto de las medidas agresivas implementadas contra Cuba por el gobierno de Estados Unidos, constituye la causa fundamental de las dificultades económicas actuales, con inevitable incidencia en todas las esferas de la sociedad. Sin embargo, no estamos sentados esperando a que nos quiten el bloqueo y nos retiren de la lista de supuestos patrocinadores del terrorismo”.
En otro momento de su alocución, Valdés Mesa expresó: “Siempre será poco el reconocimiento a este pueblo, que enfrenta las dificultades de la vida cotidiana, sin perder la confianza en que solo el Socialismo puede vencerlas con justicia”.
Al alabar el esfuerzo de los espirituanos, Valdés Mesa ratificó que han sabido estar, una vez más, a la altura de su gloriosa historia, que atesora un admirable legado de tradición de lucha desde la etapa colonial hasta el presente.
Foto: Estudios Revolución.
Sancti Spíritus tiene un lugar destacado en la guerra de liberación y en la entrega de sus hijos a la Patria y a la construcción de la nueva sociedad, anticipada por Fidel en el Programa del Moncada.
“Las bellas imágenes que hemos podido disfrutar durante el acto, rememoran momentos culminantes de la gesta que en estos campos protagonizaron hombres de la talla de Serafín Sánchez Valdivia. En la manigua espirituana vino al mundo Panchito Gómez Toro, paradigma del patriotismo, la fidelidad y la valentía de la juventud cubana.
“Esa es la estirpe de nuestro pueblo, de los combatientes del Ejército Rebelde y de la lucha clandestina; de los milicianos de Girón y la lucha contra bandidos, que tuvo un escenario decisivo en esta provincia; de sus internacionalistas; de los millones de cubanas y cubanos que enfrentan los no menos complejos y peligrosos desafíos actuales.
“Que el enemigo no se haga nuevas ilusiones, pues inexorablemente lo llevarán otra vez al desengaño.
“Los herederos de tan extraordinario caudal de heroísmo y sacrificio, continuaremos por siempre la obra de la Revolución.
Frente a cada obstáculo, dificultad o sacrificio en bien de la Patria, incluido el de la propia vida, continuaremos repitiendo aquella sublime orden del Mayor General Serafín Sánchez Valdivia, sabiéndose herido de muerte por una bala enemiga: ¡No importa, que siga la marcha!.
