El diseño ergonómico se centra en la compatibilidad de los objetos y sus entornos con los seres humanos que los utilizan. Los principios del diseño ergonómico se pueden aplicar a los objetos cotidianos y a los espacios de trabajo.
El diseño y la ingeniería van de la mano en el propósito de combinar funcionabilidad y estética que tienen como referencia a las personas, de ahí que la ergonomía desempeñe un papel fundamental para que cada objeto que tenemos cerca se adapte a nuestra forma.
Estamos rodeados de cosas que al parecer no tienen ninguna utilidad, sin embargo a diario la vida demuestra que si las observamos con detenimiento descubriremos su provecho y la razón por la que fueron creadas.
Algo tan básico como los palillos para limpiar los dientes: poseen dos ranuras en su extremo superior que al partirlo permite colocarlo por la punta que tuvo contacto con la boca sin tocar el mantel. Otro ejemplo es el orificio en las ventanas de los aviones que regula la presión al aumentar la altitud y además evita que se empañen.
Se puede mencionar también el trozo de tela que viene con un botón en la ropa. No es para convertirlo en un parche, sino para probar diferentes tipos de lavado en la tela de tus prendas. El orificio en los candados sirve para que el agua no se acumule dentro de este y se oxide estando en exteriores, así como también para lubricarlo.
Las líneas en las navajas son para poder renovar el filo cuando se gasta y para hacerlo se ocupa la parte de plástico que viene abajo.
La parte azul de las gomas es para borrar tinta, sin embargo solo funciona en papeles gruesos ya que es mucho más destructora. El pequeño orificio en las tapas de los lapiceros en realidad no es para evitar que se sequen, sino para prevenir o disminuir el peligro de que los niños se ahoguen en caso de tragárselas.
Las puntas que vienen en algunas tapas son para atravesar con ellas el sello protector del producto; los orificios en las reglas son para poder colgarlas.
Los pequeños bultos que tienen los teclados son para ubicar sin mirar las teclas, ya que en ellas deben ir los dedos índices. Si es que escribes con todos los dedos de la mano.
El orificio en la parte de atrás de los teléfonos celulares, al lado de la cámara, es un micrófono para cuando grabas con este. La hendidura en las botellas de vino está ahí para compensar la presión que se ejerce en ellas durante el proceso en que el corcho es insertado.
Los plásticos en las tapas de las botellas no son para que se cierren perfectamente, sino para mantener el gas y el líquido bien sellados. La flecha pequeña que ves al lado del símbolo de la gasolina indica hacia qué lado del coche encuentras el estanque para cargar.
El orificio al final de las cintas de medir es para poder insertar clavos o tornillos para asegurarla mientras estás midiendo. Luego de conocer las anteriores muestras de un buen diseño sería provechoso que cada vez que usemos algo estudiáramos su forma ya que de seguro su creación estuvo pensada para hacernos la vida más agradable y cómoda.