La historia se repite una y otra vez: nace un niño y la alegría es infinita para los padres, y el resto de la familia, más aún para las sociedades porque representan el futuro y la esperanza.
En Cuba el acontecimiento moviliza a todos . Desde el triunfo revolucionario en 1959 los niños son privilegiados de su tiempo y no se escatiman recursos y voluntades para que crezcan sanos y felices.
Al nacer los niños cubanos estan protegidos de forma gratuita con 11 vacunas contra 13 enfermedades prevenibles, entre estas, hepatitis B,infecciones por Haemophilus influenzae tipo B, difteria, tétanos, poliomielitis, parotiditis, rubéola,sarampión, enfermedad meningocócica y la fiebre tifoidea.Es reconocido el aporte de Cuba como pionera de la vacuna contra la enfermedad meningocócica tipo B.
Los niños pueden acceder también a otras ventajas sociales, como el derecho al deporte, a la cultura, a la recreación, a una televisión sana, exenta de violencia y pornografía, así como a una activa participación social.
La ley de leyes en Cuba reconoce los derechos elementales de cada niño (sin distinción de sexo, raza, origen social o de otra índole) y no deja su protección a la buena voluntad institucional o la caridad individual.
El especial interés por educar y amparar a los más pequeños no es nuevo para los cubanos. ¿Quién ignora que en Cuba anualmente la tasa de mortalidad infantil por cada mil nacidos vivos es de las más bajas del mundo? ¿Quién no sabe que todos los niños van a la escuela gratuitamente? .
Cuba defiende y aplica en la sociedad que no haya niño que no tenga escuela, alimentación y vestido – promover la educación patriótica y la formación comunista de las nuevas generaciones y la preparación de los niños, jóvenes y adultos para la vida social – Todos tienen derecho a la educación lo que proporciona a cada niño y joven, cualquiera que sea la situación económica de su familia, la oportunidad de cursar estudios.. La niñez y la juventud disfrutan de particular protección por parte del Estado y la sociedad.
La familia, la escuela, los órganos estatales y las organizaciones de masas y sociales tienen el deber de prestar especial atención a la formación integral de la niñez y la juventud..
Pero esas realidades, aunque cotidianas, no se limitan al marco nacional. Cuba es estado parte en la Convención de los Derechos del Niño desde 1991. De igual modo, las leyes incluyen severas sanciones ante los casos de corrupción de menores y el país se ha adherido a instrumentos internacionales que protegen a niños y adolescentes contra la venta, prostitución, utilización en pornografía, trata y otras formas de abuso sexual.
En contraste con la realidad cubana, reconocida y aplaudida por el mundo de cara al 2030 vivirán en la pobreza extrema 167 millones de infantes,- 69 millones de menores de cinco años habrán fallecido debido a enfermedades curables, y 60 millones en edad de asistir a la escuela seguirán sin escolarizar.
Datos tomados de Intervención de la delegación de la República de Cuba en el Tema 69: “Promoción y protección de los derechos del niño” 72 AGNU – Tercera Comisión. Nueva York,