Los presidentes de Rusia y de China, Vladímir Putin, y Xi Jinping, destacaron durante las últimas horas, la intensificación de los lazos energéticos entre los dos países, lo cual ha permitido a Moscú aumentar un 64 % la facturación desde comienzos de año y un 10 % los volúmenes de los suministros.
“La energía sigue siendo una de las áreas clave y más dinámicas de nuestra cooperación económica”, dijo el mandatario ruso en un mensaje a los participantes del IV Foro Energético ruso-chino.
Putin recalcó que, recientemente, se ha logrado asegurar un altísimo nivel de vínculos bilaterales en los sectores de petróleo y gas, carbón y energía, y proyectos conjuntos a gran escala para centrales nucleares en China y la producción de gas natural licuado se están implementando sistemáticamente.
Por su parte, Xi señaló que “la cooperación energética entre China y Rusia es la piedra angular de la cooperación práctica entre los dos países” y también sirve como “una fuerza efectiva para proteger la seguridad energética global”, según la agencia moscovita TASS.
El viceprimer ministro de Rusia, Alexander Novak, recordó que China se está convirtiendo en el mayor consumidor de energía rusa.
“Este año, la facturación del sector energético ha crecido un 64 % con respecto al año pasado, en términos físicos las entregas han crecido alrededor de un 10 %”, dijo. Argumentó que las exportaciones de gas natural licuado desde Rusia a China se incrementaron en un 32 % entre enero y octubre en comparación con el mismo periodo del año anterior.
Otros elementos destacables son los aportados por el consejero delegado de la petrolera rusa Rosneft, Ígor Sechin, quien añadió que actualmente el volumen de gas natural licuado exportado a China desde Rusia es relativamente pequeño, pero auguró un aumento futuro, muy similar al que manifiesta el suministro a través de gasoductos (un 60 % este año, según sus cálculos).
También el vicepresidente de la Corporación Nacional de Petróleo de China (CNPC), Huang Yongzhang, por su parte, recalcó que China debe aumentar continuamente el volumen de gas ruso a través de la ruta oriental, en lo que ya trabajan ambos países.
El proyecto de la ruta del Lejano Oriente se encuentra en fase de planificación en cuanto a su diseño y la estimación de costes, mientras que continúan las negociaciones para el suministro de gas a través de “Fuerza de Siberia-2”, que pasará por el territorio de Mongolia hasta China.