Cuba dispondrá para el 2023 de un Plan de la Economía dirigido a la gradual recuperación del país, a partir de la reactivación de las capacidades productivas nacionales y la captación de divisas que garantice el incremento gradual y sostenido de la oferta de bienes y servicios.
En la presentación hoy ante la Asamblea Nacional del Poder Popular (Parlamento) de los objetivos y metas del venidero año, Alejandro Gil Fernández, vice primer ministro y titular de Economía y Planificación, mencionó entre ellos avanzar en la estabilización macroeconómica de la nación y consolidar la reconstrucción del mecanismo de asignación de divisas, mediante la diversificación de los mecanismos de acceso.
También lo son continuar avanzando en la recuperación de capacidades del sistema electroenergético nacional, en la reducción de las desigualdades, y en la transformación integral de la empresa estatal socialista, así como consolidar el proceso de descentralización de competencias a los territorios, dijo.
Gil Fernández mencionó entre las metas para el venidero calendario incrementar las exportaciones mil 037 millones por encima al estimado del 2022, y alcanzar unos 3,5 millones de visitantes internacionales, más del doble de lo logrado en el actual calendario.
Alertó que el aumento de los precios de los productos en el mercado internacional impactará en el costo de la canasta familiar normada, lo cual genera una inflación importada.
Para el 2023 se planifica un crecimiento de las producciones agropecuarias, se proyectan más de 30 mil nuevas viviendas, así como inversiones importantes en el sector energético y en la industria del ocio, en la que se prevén terminar 10 hoteles, con tres mil 147 habitaciones.
Tras un 2022 en el cual hubo 480 empresas estatales con pérdidas, para el próximo año la cifra se reducirá solo a 83, y por otra parte deben surgir cerca de cuatro mil nuevos actores económicos.
Debe existir una mejoría en el programa nacional de medicamentos y se respaldan recursos para el desarrollo de la ciencia, afirmó Gil Fernández al intervenir en el X Período de sesiones de la Asamblea Nacional, en su IX Legislatura, con sede en el capitalino Palacio de Convenciones.
Con estos niveles de actividad, dijo, estamos diseñando un crecimiento del Producto Interno Bruto de un tres por ciento a precios constantes, con lo cual se mantendría el ritmo ascendente para alcanzar los niveles de antes de la pandemia de COVID-19.
Según Gil Fernández, el 2023 va a ser un mejor año, pues se prevé un mayor aseguramiento de combustible, que cubre la demanda, un mayor respaldo de la energía eléctrica, un crecimiento del turismo, un incremento de los ingresos por exportaciones y un aumento de la oferta de bienes y servicios a la población.
El vice primer ministro concluyó su intervención ante el Parlamento afirmando que nada caerá del cielo, y que se debe trabajar con optimismo, pero sin triunfalismo.
Tras la presentación del informe varios diputados intervinieron en aras de aportar ideas, y expresar preocupaciones, en torno a los objetivos y metas para el 2023, año en el que también el país debe hacer todo lo posible por reducir la inflación, como pidieron algunos.
EN AUDIO el reporte de nuestro periodista Antonio Jesús Matos desde el Palacio de Las Convenciones de La Habana: