San Salvador- El guantanamero Arlen López (80 Kg) fue el encargado de romper el hielo en la escuadra cubana de Boxeo y lo hizo por la puerta ancha, aunque recibió bastante oposición del costarricense Víctor Alvarado.
El tico no respetó la jerarquía del doble campeón olímpico y le aceptó el reto de pelear en la corta distancia, aunque el nuestro pudo mostrar su mejor versión en el último asalto. Aun así sus golpes no llegaron con la potencia acostumbrada, normalmente el también titular mundial viene de menos a más en los eventos.
En un escenario poco habitual para las citas de este tipo, pues los organizadores colocaron el ring en uno de los salones del Ministerio de la Cancillería de El Salvador, Arlen entró frío, como decimos en el argot deportivo. “El objetivo era tratar de sacarlo todo en este primer combate, a veces salimos en la primera pelea un poco desorganizado, fuera de distancia y esas cosas las vamos corrigiendo durante la competencia”.
Arlen trató de efectuar el combate en la corta distancia, donde no pudo desembarcar con toda su fuerza los ganchos y swings. “Era un contrario más alto que yo, tenía que trabajar en los planos inferiores para tratar de debilitarlo y poder trabajar con mis golpes más efectivos”.
El monarca de las citas olímpicas de Río de Janeiro 2016 y Tokio 2021, viene a este país centroamericano a tratar de recuperar la corona que perdió en Barranquilla, pues ya había subido a lo más alto del podio en Veracruz en el 2014. “Ese es mi objetivo, saldré a dar el máximo en cada combate y espero que pueda alcanzar esa medalla de oro para regalársela a mi pueblo”.
Arlen enfrentará en la fase de cuartos de finales, ya por la presea de bronce al nicaragüense Leonardo Aragón, quien comenzó con victoria ante el trinitario Jeramiah Thomas.
Escuche y descargue desde nuestro Canal iVoox la propuesta radial.