Siempre repetimos que la música tiene muchas aristas interesantes e insólitas, pues los éxitos no siempre tienen el mismo brillo en todas partes y si investigamos vamos a encontrar elementos insospechados.
A pesar de que varias de sus contemporáneas alcanzaron gran popularidad, ninguna otra exponente de la canción jíbara ha mantenido una vigencia tan prolongada en Puerto Rico como “La Calandria”.
Como trovadora solista, a Ernestina Reyes se le estampó el calificativo de “La Calandria” con que se haría famosa, a pesar que el mismo ya identificaba a la trovadora cubana Nena Cruz, cuyas actuaciones junto al legendario Joseíto Fernández en el programa “El suceso del día”, que cada tarde transmitía el Circuito Radial CMQ desde La Habana, podían escucharse en Puerto Rico.
A “La Calandria” le corresponde haber sido la primera intérprete de la canción jíbara que en 1954 se presentó en la televisión boricua; la primera en realizar recorridos por los teatros hispanos de Nueva York, Nueva Jersey, Chicago y Filadelfia y la primera en figurar en los escalafones de popularidad radial, casi siempre interpretando composiciones propias. Durante el período 1956-1960 en su voz alcanzaron categoría de hits “Brindis”; “Por si no volviera a verte”; “Solos tu y yo”; “Felicitaciones” y “Somos boricuas”.
Después, su éxito más resonante fue el bolero “Ese hombre es mío”, de su propia autoría. Se fue a Nueva York, donde recibió numerosos premios y distinciones en reconocimiento a su aportación artística, mientras que en Puerto Rico jamás fue objeto de homenaje alguno.
Ernestina Reyes Vázquez, “La Calandria”, falleció en el Hospital newyorkino Calvary el 25 de mayo de 1994 y su última voluntad fue que sus cenizas fueron esparcidas sobre su pueblo natal.
Pero su tema grande en Cuba, “El Reto”, es prácticamente desconocido en la Isla del Encanto, solo fue un suceso en nuestro país.
Hay más. Hoy prácticamente olvidada, Gina León nació en La Habana el 19 de abril de 1937 y de muy joven le gustaba cantar, por eso en 1956 se presentó en un programa de aficionados en el que resultó ganadora. A partir de ese momento se unió al maestro Candito Ruiz, quien le preparó el repertorio con que debutó como profesional en el cabaret Monte Casino.
En 1957 viajó a Panamá y a principios de la década del 60 comenzó aquí una enconada rivalidad con Elena Burque, quien en aquellos días también daba sus primeros importantes pasos como solista. La Burque tenía mas condiciones, pero Gina era una mulata espectacular, con una imagen espléndida, impulsora de un alto moño en su pelo que rápidamente se convirtió en moda.
Gina León hizo muy popular el bolero “Aléjate”, del mexicano Roberto Cantoral, y con el de plantilla pasó a ser la figura principal en los espectáculos “Serenata Mulata” y “Me voy pa’l Brasil” del Hotel Capri.
Fue invitada al Festival de Sopot, Polonia, en 1962, y de ahí viajó a Berlín. En 1987 estuvo de nuevo en Panamá y un periódico de allí la calificó de “extraordinaria cantante cubana de los ritmos románticos”, “con una voz tremendamente potente”.
El autor de “Aléjate” es Roberto Antonio Cantoral García, un cantante y extraordinario compositor mexicano, presidente por muchos años de la Sociedad de Autores y Compositores de México y autor de “El reloj”, ”El triste”, “Al final”, “Noche no te vayas”, “Regálame esta noche” y “La barca”.
Posteriormente formó el trío Los Tres Caballeros, con el que hizo toda una época en la canción romántica de México, además de realizar importantes giras en diversos países, como Estados Unidos, Japón y Argentina, entre muchos otros.
En 1982 fue elegido presidente de la Sociedad de Autores y Compositores de México y en 2003 fue nombrado, por sexta ocasión, presidente del Comité Iberoamericano de la Confederación Internacional de Sociedades de Autores y Compositores.
Su canción Plegaria de paz» se trasmitió durante tres años consecutivos en el Vaticano, pero a pesar de todo eso, en su México natal comprobé que allí nadie conoce Aléjate, el gran éxito de Gina León.