Tokio, Japón.- Imposible no emocionarse con este espectacular resultado que ha conseguido el equipo Cuba en el V Clásico Mundial de Béisbol. Millones de cubanos saltaron de emoción, cuando Raidel Martínez ponchó al cuarto bate de Australia, Darryl George y de esta manera sellar la victoria 4 anotaciones por 3 que le dio el pase a las semifinales.
Resultó un choque tenso desde el mismo inicio, incluso los australianos comenzaron delante con una en la segunda entrada ante los envíos del abridor Yariel Rodríguez. Inmediatamente los antillanos fueron a la carga, con una carrera en el cierre del tercero y racimo de 3 en el quinto, aseguraron el éxito.
Clave el imparable al jardín derecho de Yoelkis Guibert, que remolcó a dos compañeros para el home. Aunque los de la isla continente se acercaron, gracias al cuadrangular del inicialista Rixon Wingrove, que por cierto remolcó las tres de su selección.
Armando Johnson, se emocionó tras este resultado, que hace revivir la pasión después de tantos años de reveses en este deporte. “Estamos viviendo un momento increíble con todos estos muchachos que me han hecho hasta llorar. Este grupo siempre ha estado muy unido, después de que perdimos los dos primeros juegos, no perdimos el ánimo y salimos a pelear cada partido. Gracias a todos los que han ayudado en la preparación, porque este es un resultado de todos”.
El capitán Alfredo Despaigne revivió sus mejores momentos en la Liga Japonesa y recibió el reconocimiento del público nipón. En el desafío ante Australia volvió a responder como 4to madero, al batear de 3-1 con un remolque. “Es lo más grande que me ha pasado en mi carrera, siempre en los otros Clásicos que había estado, no pudimos avanzar a las semifinales”.
Con un relevo de 1.2 inning, sin carreras y con par de ponches, Miguel Romero se anotó el triunfo. “Nadie esperaba que lográramos llegar a Estados Unidos, ahora vamos para allá y cualquier cosa puede pasar porque este equipo está inspirado”.
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