El doctor Elio Edgar Lozano, especialista en endocrinología, fue lapidario al afirmar que “el impacto de la colaboración médica en México está por escribirse”. Él está seguro de la profesionalidad y la esencia humanista de la medicina cubana y lo demuestra cada día en el Hospital General de Tlaxcala, donde presta sus servicios actualmente.
Tlaxcala es un pequeño estado ubicado en el centro de México, al este del Distrito Federal con aproximadamente dos millones de habitantes; muy cerca, a dos horas de distancia de la capital del país Azteca. Hasta allí llegamos los de Radio Rebelde para conversar con los integrantes de la brigada cubana (69), comandada por el Dr. Jorge López Romero.
Estamos distribuidos en 10 municipios del estado y hemos tenido una buena acogida por parte de las unidades de salud y sus directivos en las distintas actividades asistenciales que realizamos en las áreas de salud. Además, nuestros pacientes están muy contentos con nuestra presencia. Muchos nos dicen: «lo estábamos esperando, doctor».
“Hay dificultades con la ausencia de especialistas; por ello, predomina en nuestra misión la especialidad de medicina familiar aunque hay también geriatras, ortopédicos, nefrólogos, cardiólogos, oncólogos e intensivistas, entre otros…
“Nos hemos insertado en el trabajo de los galenos mexicanos y hemos cumplido con su protocolo. En su sistema de trabajo hay prioridades; sobre todo, la coordinación de la atención primaria con la secundaria. Tienen marcado interés además por el desarrollo del programa Materno Infantil, donde mucho podemos aportar los cubanos.
En esta primera etapa de nuestra estancia hemos logrado insertarnos en el sistema de trabajo de los colegas mexicanos. No venimos a imponer, solo sumarnos para lograr indicadores de salud positivos. Con los pacientes ha sido muy reconfortante.
El doctor Jorge tiene una admirable hoja de servicio. Ha cumplido 6 misiones internacionalistas, dos veces en África (Ruanda primero, Angola después); luego Ecuador y, recientemente, en Venezuela durante los duros momentos de la batalla contra la COVID-19. Para el coordinador de la brigada cubana en Tlaxcala, México es una colaboración especial, se refiere al compromiso con las vidas salvadas, a la solidaridad histórica entre los pueblos. Habla de los retos por pertenecer al Ejército de batas blancas y vuelve a pensar en el compromiso con la vida.
¿¿¿Y el corazón???
Le hago la pregunta con toda intención a la doctora Gabriela Arce García, cardióloga guantanamera con 35 años de experiencia, quien cumple una misión de salud por primera vez y a sus 60 años siente que tiene mucho que hacer… Apta física y mentalmente, me asegura, mientras sonríe y habla de la familia, de sus dos hijos médicos, de su nieto, de los amigos a quienes extraña y logran acelerar el ritmo de su corazón cuando les recuerda… sus ojos brillan, sonríe y me confirma que está bien y que regresará con la misión cumplida.
Con este mensaje, retomo la conversación con el doctor Elio, endocrino quien amablemente me muestra una foto reciente. En ella están los colaboradores cubanos y pacientes mexicanos quienes, con orgullo, insistieron en esa instantánea como prueba de confianza, respeto y el recuerdo de la llegada.
En la foto, en segundo plano, hay una joven doctora rubia, delgada, apasionada en su verbo. Su nombre es Leanne Valcárcel Tamayo, holguinera especialista en Gastroenterología. Sus primeras palabras: agradecer a Cuba por la oportunidad de cumplir una misión de salud para ayudar a los más necesitados.
“Antes de ser médico, fui licenciada en enfermería –asegura– y luego tuve la oportunidad de estudiar mi carrera de medicina y mi especialidad. Agradezco mucho a mi país por la confianza, también a quienes nos recibieron en esta tierra hermana. Para mí, la mayor recompensa es la aceptación de los pacientes, su cariño. Nunca había tenido la experiencia; es mi primera misión internacionalista. Todavía estoy impactada, al inicio tenía miedo… no sabía cómo nos iban a recibir. En mi mente trataba de representarme el encuentro con los pacientes… ¿Cómo sería?
Al llegar, ocurrió para mí el encuentro y ese es el reto, que ellos confíen, que sepan que puedo ayudarlos a curar sus dolencias, no soy una extraña. No me siento así. En aproximadamente 40 días, les quiero, me preocupan. Los siento cercanos y estoy segura que muy pronto seremos amigos.
México lindo y querido
En Tlaxcala, los médicos cubanos dejarán su huella, protagonizarán la epopeya de la vida al igual que en otros 8 estados de México, donde ya se encuentran laborando, me asegura el doctor Alfredo González Lorenzo, coordinador general de la misión médica cubana. Él me aclara, además, que los trabajadores de la salud sienten una enorme gratitud y compromiso con el pueblo mexicano.
Nuestra brigada médica tiene el privilegio y la oportunidad excepcional de participar en uno de los ejes estratégicos mas trascendentales de la cuarta transformación emprendida por el gobierno de Manuel López Obrador, me refiero al programa de salud IMSS Bienestar que tiene el objetivo de garantizar el acceso universal a los servicios de salud de los pacientes mexicanos con menores posibilidades económicas de las zonas más apartadas e inaccesibles.
Por eso hoy, 414 médicos cubanos de 27 especialidades se encuentran en los hospitales, fundamentalmente comunitarios, de 9 estados (Nayarit, Colima, Oaxaca, Campeche, Veracruz, Tlaxcala, Zacatecas, Sonora y Baja California del Sur) y 52 municipios; muchos de ellos a 6 u 8 horas de camino desde las capitales estaduales…
Conscientes del reto que representa la rica historia de la medicina mexicana, hemos venido a brindar servicios de salud en el lugar que se nos pida junto a los médicos mexicanos, respetando su organización de salud y cumpliendo sus guías y protocolos sin escatimar esfuerzos y poniendo a disposición del hermano pueblo mexicano nuestros saberes y experiencias con humildad y total desinterés material y el firme propósito de aliviar el dolor a los pacientes de esta hermana tierra y la felicidad de sus familias y pueblo en general.
Estamos en la tierra de Benito Juárez, Lázaro Cárdenas y muchos otros próceres de su independencia. Para Cuba, México es especial y nuestra presencia reverencia su historia común de hermandad.
Ahora le proponemos escuchar y descargar la propuesta sonora de este reportaje: