El seguimiento mensual que realiza el Primer Secretario del Comité Central del Partido y Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, al cumplimiento de los acuerdos del IX Congreso de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC) se detuvo en febrero, la cita del mes en curso puso la mirada, este martes, en el recién concluido proceso de balance de las 36 secciones de la organización gremial.
Por más de dos horas, desde el Palacio de la Revolución, el Jefe de Estado, escuchó al auditorio, que el Presidente de la UNEAC, Luis Morlote Rivas, calificó de congreso, por estar presentes los máximos representantes de la organización en cada provincia y el Municipio Especial Isla de la Juventud, las cinco asociaciones, el Secretariado nacional, además de invitados el Consejo de Dirección del Ministerio de Cultura, encabezado por su titular, Alpidio Alonso Grau.
En varias intervenciones los intelectuales consideraron el reciente proceso de crecimiento como el más importante y estratégico de las últimas décadas, particularmente Jorge Núñez, Presidente de la UNEAC de Guantánamo, comentó sobre la representatividad que logra ahora en el Comité Provincial, mientras que la Premio Nacional de Teatro y Vicepresidenta de la organización, Corina Mestre, confesó que ha sido muy alentador la cantidad de jóvenes, “pero de jóvenes que no solo quieren estar, sino participar”.
Ante la presencia del Miembro del Secretariado del Comité Central y Jefe del Departamento Ideológico, Rogelio Polanco Fuentes y de la Viceprimera Ministra Inés María Chapman Waugh, los temas giraron en torno a la colonización cultural. El Presidente de la UNEAC en Sancti Spíritus, Marco Calderón, valiéndose de sus habilidades como poeta, narrador y guionista de radio, calificó este flagelo como una segunda base naval que intenta instalarse en nuestros modos de pensar.
Si despojamos a los jóvenes de valores atentan contra la Revolución, “y eso no lo podemos permitir”. Cómo lo están intentando- explicó interrogándose el espirituano- están enseñando que el sendero del éxito está en quien más dinero tenga y en quien carezca de conceptos, lo que se llama la aculturación del joven.
Siguiendo la misma línea temática hizo uso de la palabra el Vicepresidente de la UNEAC, Pedro de la Hoz, quien llamó a llenar de sustancia cultural los términos resistencia creativa, para lo cual se demanda de coherencia y sistematicidad y de que los medios entretengan, pero con cultura.
El cumplimiento de los 68 acuerdos emanados de la magna cita de 2021, así como el seguimiento a los más de 500 planteamientos han ocupado la agenda de la máxima dirección del país desde mediados de 2021, no obstante como reconoció en el encuentro el Presidente Díaz-Canel persisten insatisfacciones en las relaciones entre la cultura y los medios de comunicación, y entre Cultura y Turismo.
Con apego a la transparencia se señaló también que no se ha logrado la transformación del sistema empresarial de la música. Respecto a las tendencias de esta manifestación de tanto arraigo en Cuba, el presidente de la UNEAC en Santiago de Cuba, Rodulfo Vaillant García, propuso la realización de un encuentro para abordar lo que hoy afecta a la música cubana.
En la conclusión del intercambio el Presidente de la República subrayó el mérito que han tenido las asambleas de balance, encrucijada entre el congreso anterior y el que se avecina.
El Jefe de Estado afirmó que si alguien simplificara o desconociera el compromiso que tiene la vanguardia artística con la Revolución, pensaría que en un momento difícil como este, las asambleas serían de demandas y fueron todo lo contrario, «porque esa vanguardia sabe comprender el momento histórico que se vive, sabe comprender -dijo- las causas de los problemas».
«Tengan la seguridad de que en estos momentos no hay ningún prejuicio con la cultura desde la dirección del Partido, del Gobierno, ni de las instituciones culturales», acotó Díaz-Canel y argumentó sobre la madurez que se ha alcanzado en los espacios de discusión, al tiempo que recordó el papel de Fidel como visionario de esas relaciones definitorias entre los artistas e intelectuales y la Revolución.
El dignatario agregó: «Y todo lo que ustedes tengan como insatisfacción denúncienlo, todo lo que crean que se pueda cambiar, propongan cómo cambiarlo, que siempre van a tener oídos».
En el diálogo los representantes de los escritores y artistas expresaron al Presidente Díaz-Canel la voluntad de acompañar y apoyar a la Revolución, en ese sentido el dignatario definió prioridades en las que se demanda la contribución de este sector.
Les pidió superar la COVID-19, ir a un rescate, con más intensidad, de la programación cultural, los eventos, los debates sobre la cultura, todo lo que alimente el espíritu y que anime al pueblo en momentos muy desafiantes.
Otro aporte decisivo de la UNEAC tiene que ser en el programa de descolonización cultural. «Hay que asumirlo con profundidad, con inteligencia, con coherencia, muy activos y tiene que ser parte del debate de todos los días».
En ese programa de enfrentamiento a la colonización cultural hay que atender todos los espacios donde pueda ser ultrajada “la identidad que nos quieren robar” y ahí están todas las insatisfacciones mencionadas sobre la televisión, expresiones de vulgaridad en la música así como la indecencia en un grupo de espacios.
«Yo siempre defiendo que la Revolución no puede estar ajena a la decencia. La vocación humanista de la Revolución tiene que defender la decencia», acotó el dirigente político.
Lo otro que se necesita para enfrentar la colonización cultural es rigor en las explicaciones, “en algunos ámbitos cuando vamos a defender la descolonización cultural no nos van a entender de primer momento, no vamos a ser simpáticos, de primer momento”, pero es un tema diario, porque son todos los días que vivimos bajo ese fuego de contenidos.
Para transformar integralmente a los barrios se requiere de la participación de los intelectuales -recalcó el mandatario- y explicó cómo pueden ayudar en el estudio antropológico de las comunidades, en capacitar a los líderes comunitarios y en apoyar a los trabajadores sociales. Lo espiritual hay que trabajarlo en todos los barrios, no solo en los vulnerables, sentenció.
Para el encuentro de marzo el Primer Secretario del Comité Central del Partido propuso analizar el seguimiento a los planteamientos emanados del recién concluido proceso de balance, con la participación para ello de los organismos de la administración central del estado. La meta -puntualizó el Presidente- es llegar al congreso sin acuerdos pendientes a cumplimiento.
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