Teniendo en cuenta la condición de Cuba como signataria de la Convención sobre el comercio internacional de especies amenazadas de la flora y fauna silvestres, la Aduana General de la República vierte sus esfuerzos como órgano encargado de dirigir y controlar la aplicación de la política del Estado y el gobierno para la prevención y enfrentamiento de hechos ilícitos que pongan en peligro la vida silvestre en el país.
En este sentido, la legislación cubana establece que para la importación o exportación de especies amenazadas de la flora y la fauna silvestre que pretendan realizar las personas naturales, requieren del permiso otorgado por el Centro de Gestión e Inspección Ambiental del Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente.
Yaima Tirador Lemagne, jefa del Departamento de Gestión de Riesgos y Enfrentamientos de la Aduana General de la República, explicó que los certificados o permisos expedidos serán presentados por las personas a las que se les concedió dicho permiso.
Aunque la ley no prohíbe la exportación de especies de la flora y fauna silvestres, las autoridades aduaneras alertan sobre el proceder de elementos inescrupulosos que pretenden violentar la legislación vigente.
La jefa del Departamento de Gestión de Riesgos y Enfrentamientos de la Aduana General de la República alertó además sobre los modus operandi de extracción del país de estas especies, algo que no solo es ilegal, sino que atentan contra la salud de estas especies.